14 Mar
Carlos I y su herencia territorial
Con Carlos I, los reinos de la monarquía hispánica recaían en la casa de Austria, a los que se sumará una gran herencia territorial. Convirtiéndose en la potencia hegemónica de Europa. Carlos I y su hijo Felipe II establecerán como objetivos políticos, defender los intereses dinásticos y el catolicismo.
Herencia de Carlos I
La muerte de Fernando de Aragón en 1516, puso fin al reinado de los Trastámara en la península. Su reinado estuvo caracterizado por una importante herencia familiar, de sus abuelos maternos, Isabel y Fernando. Carlos recibe Castilla y Aragón, posesiones en Italia y América. De parte de su abuelo paterno, Maximiliano de Austria, posesiones austriacas, y le sucede, convirtiéndose en emperador alemán. De su abuela paterna, María de Borgoña, recibe los Países Bajos y el Franco Condado.
Soberanía de Carlos I
Fue un soberano cosmopolita que gobernaba sobre estados heterogéneos. Los ingresos y poder del monarca procedían de Castilla.
Revoluciones y conflictos
La llegada de Carlos I provocó cierto malestar en Castilla, ya que no conocía la lengua castellana y venía acompañado de nobles flamencos. Además, insistió en la recaudación de subsidios para sufragar su elección como emperador de Alemania, en 1519, lo que le llevará a abandonar Castilla y nombrar regente a Adriano de Utrecht.
- Revuelta de las comunidades (1520): insurrección en ciudades como Toledo, Segovia, Ávila y Salamanca.
- Derrota del ejército comunero en Villalar en 1521.
Política exterior de Carlos I
Se determinaron tres grandes líneas de actuación de la política exterior de Carlos I:
- Enfrentamiento con Francia.
- Lucha contra los protestantes.
- Defensa de la cristiandad frente a los turcos.
Felipe II y su gobierno
Felipe II centrará su gobierno en la defensa del catolicismo y el mantenimiento de la hegemonía europea.
Problemas internos
La rebelión de los moriscos granadinos y las revueltas de Aragón marcaron su reinado.
Conflictos externos
Guerra contra Francia, turcos en el Mediterráneo y sublevación de los Países Bajos fueron algunos de los desafíos que enfrentó Felipe II.
Deja un comentario