27 Sep
Comprobación de la presión de engrase
Para esta operación es necesario emplear un manómetro con graduación de 0 a 10 bar y un juego de diferentes adaptadores. Extraer el manocontacto, situado en la canalización principal, y conectar en su lugar el manómetro mediante el adaptador. Poner el motor en marcha y llevarlo a su temperatura de régimen. Tomar mediciones en ralentí y al régimen que indique el fabricante (a ralentí: 0,5 bar y a 3000 rpm: de 3 a 5 bar).
Posibles causas de baja presión
– Bomba de aceite en mal estado por desgaste o fuga.
– Mal funcionamiento de la válvula de descarga.
– Holguras excesivas en cojinetes de bancada y biela.
– Filtro obstruido, cuando va montado en serie.
– Mala calidad del aceite.
Posibles causas de alta presión
– Válvula de descarga defectuosa.
– Canalizaciones obstruidas.
– Filtro obstruido.
Consumo de aceite
El consumo de aceite aumenta a medida que el motor envejece. Otras causas de un elevado consumo de aceite pueden ser:
– Uso de un aceite muy fluido o de mala calidad.
– Temperatura de aceite demasiado alta.
– Segmentos bloqueados en sus alojamientos.
Se considera aceptable un consumo de aceite igual al 1% del consumo de combustible. Los motores con cilindradas inferiores a 2000 cm3 consumen como media entre 0,1 y 0,2 litros a los 1000 km. Para determinar con exactitud el consumo de aceite, se puede realizar la siguiente prueba:
– Llevar el motor a su temperatura de funcionamiento y extraer el aceite, recogiéndolo en un recipiente.
– Pesar el aceite y anotar el peso exacto para después devolverlo al motor.
– Después de hacer un recorrido de entre 300 y 500 km, extraer el aceite en el mismo recipiente.
– Pesarlo de nuevo. Poner en una probeta graduada aceite y añadirlo al recipiente hasta conseguir el mismo peso de antes.
Sistemas de refrigeración
La función de la refrigeración es mantener el motor dentro de unos límites de temperatura que no perjudiquen a sus componentes, y a la vez lograr un buen aprovechamiento del calor. La temperatura óptima de funcionamiento se denomina temperatura de régimen. El sistema de refrigeración debe permitir alcanzar esta temperatura con rapidez y mantenerla independientemente de las condiciones ambientales. Por debajo de esta temperatura no se produce una buena gasificación del combustible, y con temperaturas superiores empeora la carga de los cilindros y aumenta el riesgo de autoencendido en los motores Otto. Los sistemas utilizados habitualmente para realizar la refrigeración pueden ser de dos tipos: aire o agua.
Refrigeración por aire
En este tipo, el motor cede calor directamente al aire que se pone en contacto con él. Para facilitar el acceso del aire, el bloque de estos motores está constituido por cilindros independientes. A su alrededor se funden unas aletas, cuyo objetivo es aumentar la superficie en contacto con las zonas calientes. Las aletas se disponen sobre el motor de manera uniforme, y sus dimensiones y forma dependen de las características del motor. La cantidad de calor evacuado no solo está en función de la superficie, sino del volumen de aire que circula a través del motor. El suministro de aire se puede hacer de dos formas: por el aire de la marcha o por aire forzado.
Refrigeración por aire de la marcha
Se utiliza en motocicletas en las cuales el aire de la marcha tiene buen acceso a las partes calientes del motor.
Refrigeración por aire forzado
Se monta en algunas motocicletas de tipo scooter y en automóviles donde el aire solamente tiene acceso al motor de manera forzada.
Ventajas y desventajas
Ventajas:
– Su sencillez.
– La temperatura de régimen se alcanza más rápidamente.
– Se mantienen temperaturas más altas.
Inconvenientes:
– Las mayores temperaturas obligan a aumentar el juego de montaje entre las piezas, los riesgos de autoencendido aumentan y empeora el llenado.
– El motor es más ruidoso al no tener la cámara de agua.
Refrigeración por agua
El sistema de refrigeración por agua utiliza un líquido a base de agua como medio para extraer el calor del motor y transportarlo hasta el radiador, donde es cedido al aire. El líquido se desplaza por un circuito cerrado entre el motor y el radiador. Este líquido es impulsado por una bomba. Parte del calor es transmitido al líquido que pasa al radiador y lo recorre cediendo calor al aire que lo atraviesa. La corriente de aire es suministrada por el ventilador y por el viento de la marcha. El paso del líquido a través del radiador provoca una diferencia de temperatura entre la entrada y la salida de 5º a 8º. El líquido de refrigeración puede ser utilizado con otros fines:
– Para calefacción del habitáculo.
– Calentamiento del colector de admisión.
– Refrigeración del aceite de engrase.
– Refrigeración del aceite del cambio automático.
El circuito de refrigeración por agua lo constituyen los siguientes elementos:
– Bomba.
– Radiador.
– Termostato.
– Ventilador.
– Líquido refrigerante.
Bomba
La bomba impulsa el líquido de refrigeración. Es de tipo centrífugo y recibe movimiento del cigüeñal a través de una correa. El motor genera más calor a medida que aumenta el número de rpm, por lo que el caudal de líquido que manda la bomba es mayor y permite aumentar la capacidad de refrigeración. La bomba está formada por un eje que gira sobre cojinetes de bolas y recibe movimiento a través de la polea que se monta sobre el cubo. En otro extremo del eje se encuentra el rotor o turbina, cuyas aletas hacen circular el líquido. El conjunto va montado sobre el cuerpo de la bomba. Con el fin de evitar fugas entre el cuerpo y el eje, se disponen juntas de estanqueidad. Se monta habitualmente sobre el bloque, a la altura de los cilindros, de manera que impulse el líquido procedente del radiador hacia el interior del motor. El accionamiento puede hacerse a través de la correa accesorio o distribución.
Radiador
Es un intercambiador de calor entre el líquido y el aire. El calor es cedido en parte al aire a su paso por el radiador. Se sitúa sobre el vehículo de tal forma que pueda recibir el viento de la marcha. Adicionalmente, se coloca un ventilador. El radiador está formado por un cuerpo y dos depósitos. El cuerpo del radiador lo componen unos finos tubos que comunican ambos depósitos. Entre los tubos se sueldan unas aletas cuya misión es aumentar la superficie en contacto con el aire. Los radiadores pueden ser de flujo vertical o de flujo transversal, dependiendo del sentido en que se desplace el líquido en su interior. Los conductos de unión del radiador con el motor son manguitos de goma.
Termostato
El termostato es una válvula térmica que controla el paso de líquido entre el motor y el radiador, de manera que solo cuando el refrigerante ha alcanzado la temperatura adecuada (85ºC) se abre y deja pasar el líquido al radiador. Está formado por una cápsula cerrada herméticamente que contiene una cera. En su interior se introduce una barilla, que queda rodeada por una membrana de goma. Por el otro extremo, la varilla se apoya en la carcasa del termostato. Unida a la cápsula se encuentra la válvula, que se mantiene cerrada en frío por el muelle. Su funcionamiento se basa en el elevado coeficiente de dilatación que poseen ciertos materiales como la cera o la parafina. Cuando el líquido calienta la cápsula que contiene la cera, esta se dilata, comprime la goma y expulsa la varilla. Como la varilla hace tope en la carcasa, se desplaza la cápsula que vence la fuerza del muelle y abre la válvula. La válvula se abre entre los 80º y los 86ºC y se encuentra totalmente abierta entre los 95º y los 100ºC, con un desplazamiento de 7 a 8 mm.
Fugas del líquido refrigerante
Los lugares más frecuentes de pérdidas de líquido son:
– Manguitos.
– Radiador.
– Calefactor del interior del coche.
– Bomba.
– Junta culata.
Motor se calienta un montón
Causas:
– Bajo nivel del líquido.
– Mal funcionamiento del termostato.
– Mal funcionamiento del termocontacto.
– Radiador sucio exteriormente u obstruido.
– Correa de la bomba floja.
– Otras causas como encendido retrasado.
Tarda en calentarse
Generalmente es porque el termostato no cierra correctamente. Aunque otras causas pueden ser el continuo funcionamiento del ventilador porque se haya quedado el termocontacto cogido.
Comprobación del termostato
Desmontar el termostato de su alojamiento. Vaciar el líquido hasta un nivel apropiado, separar la tapa y extraerlo. Para comprobar el funcionamiento hay que sumergirlo en un recipiente con agua y calentarla. Controlar la temperatura con un termómetro y verificar:
– Temperatura comienza a abrirse (80 a 85ºC).
– Temperatura termina de abrirse (95 a 100ºC).
– El recorrido de la válvula (7 a 8 mm).
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