22 Feb
Platón y Nietzsche: Un Contraste Filosófico
Platón y Nietzsche representan una oposición radical, especialmente porque Nietzsche construyó su pensamiento en abierta oposición a la Filosofía Platónica. Nietzsche considera que son Sócrates y Platón los que han pervertido el conocimiento filosófico, dividiendo la realidad en dos, rechazando los sentidos y la corporalidad, para hacer de lo abstracto lo importante, y menospreciar lo realmente existente, lo concreto y material.
La Valoración de los Sentidos
La valoración de los sentidos es diferente en ambos autores. Mientras Platón considera que los sentidos únicamente nos dan la posibilidad de acceder a reflejos y sombras de la realidad, Nietzsche sostiene que el único conocimiento verdadero, el único conocimiento que merece tal nombre es el que procede de los sentidos. Será el desprecio de los sentidos lo que fundamente en Platón la posibilidad de acceder a un conocimiento racional, pues los sentidos nos mantienen entre sombras; por el contrario para Nietzsche el desprecio de los sentidos es también desprecio del mundo y vaciamiento de todo, nihilismo.
Razón vs. Sentidos
Platón sostiene que el auténtico conocimiento sólo se puede conseguir mediante la razón en el ejercicio de la dialéctica, en un plano absolutamente abstracto. Nietzsche que la razón meramente abstracta no es más que un ejercicio de vacío, porque lo abstracto únicamente existe en la mente, en los delirios de los racionalistas, porque en la realidad no nos encontramos con ninguna abstracción, sino con materialidades.
El Lenguaje y la Realidad
En el diálogo Cratilo, Platón deja clara de que a partir del ejercicio del lenguaje podemos alcanzar las ideas. Platón refleja una concepción, que durará siglos, según la cual lenguaje y realidad tienen una estructura lógica común, de forma que el conocimiento de las estructuras del lenguaje nos lleva al conocimiento de las estructuras de la realidad. Nietzsche mantiene que el lenguaje, tal y como lo conocemos y lo hemos heredado, tiene en su seno una metafísica, una determinada concepción de la realidad que castiga a lo que cambia sobre lo que no cambia, nos da idea de la existencia real de conceptos abstractos y minusvalora a lo concreto y real.
Ontología: Un Mundo o Dos
Como es evidente Nietzsche rechaza la división platónica de la realidad en dos mundos, el sensible y el de las ideas. Sólo existe un mundo y es el mundo en el que vivimos. La ontología platónica considera que lo verdadero es lo que no cambia, lo que permanece y es igual a sí mismo eternamente, mientras que Nietzsche tiene una postura más cercana a la que defendió Heráclito, según la cual la realidad es cambiante, mutable y dinámica, siendo engañosa la idea de permanencia o de subsistencia como cosas.
El mundo de las ideas sería, en terminología nietzscheana, es un trasmundo, esto es, una realidad inventada que se presenta como verdadera y que se convierte en norma para enjuiciar la realidad verdadera que es la material. Ese trasmundo es el “paraíso” y el Dios del Cristianismo que reelaboró la Filosofía de Platón para convertirla en un mensaje para los pobres.
El Bien y el Mal
El bien y el mal son considerados por Nietzsche no como criterios morales, sino como elementos de poder incrustados y ocultados en el lenguaje. Para Platón el bien, concretamente la Idea del Bien, era el centro de su ontología y posibilitador no sólo del ser sino también de la verdad.
Posiciones Sociales y Políticas
Socialmente tanto Platón como Nietzsche mantuvieron posiciones poco “democráticas”. Nietzsche manifestó un continuo desprecio hacia las masas trabajadoras de su tiempo y contra su articulación política, por considerar que querían coartar las posibilidades de los que habían desarrollado sus capacidades, mientras que Platón siempre pensó que el pueblo no era más que un conjunto que se movía por sus bajos instintos y dispuesto únicamente a escuchar a los demagogos. Platón deseaba excluir al pueblo de cualquier gobierno, mientras que Nietzsche estimaba que la sociedad no debía configurarse en función de los intereses del pueblo, sino de los señores.
Vigencia de Nietzsche
Buena parte de la Filosofía del siglo XX es deudora del pensamiento nietzscheano. Nietzsche ha puesto la idea de que el lenguaje no es neutral cognoscitiva ni ontológicamente. Desde Nietzsche el lenguaje ha dejado de ser un espejo en el que la realidad se reflejaba de forma diáfana. El lenguaje nos transmite una forma de la realidad que no coincide con la realidad.
En aspectos morales las reflexiones de Nietzsche sobre que la moral lo que busca es la exaltación del resentimiento y la generalización de una moral de esclavos ha sido recogida positivamente por numerosos pensadores. La moral post-nietzscheada no debería buscar la imposición de una escala menor de valores, sino de una escala superior, de unos riesgos en la vida, rechazando una moral de la humildad, del retraimiento y del silencio.
Vigencia de Platón
A lo largo de la Historia de la Filosofía la figura y el pensamiento de Platón ha sido de una importancia innegable. Whitehead ha llegado a decir que Platón ya planteó todos los problemas y la Filosofía después de él no ha sido más que un comentario a pie de página. Han existido escuelas platónicas desde la Antigüedad al Renacimiento, pero desde el nacimiento del pensamiento moderno, la influencia de Platón ha perdido fuerza.
Deja un comentario