17 Jun

Platón

Platón nació en Atenas en torno al año 427 a. C., en el seno de una familia aristócrata; es el más aventajado discípulo de Sócrates, cuya terrible muerte marcará profundamente su obra, en especial la política. Platón será el fundador de la Academia, una escuela de filosofía ateniense donde tiene como alumno a Aristóteles. En el año 347 a. C. falleció en Atenas. Ontología: ciencia del ente, del ser. Se refiere a la interpretación o teoría sobre la realidad en su conjunto. Epistemología: sinónimo de gnoseología, teoría del conocimiento. Se refiere al estado de nuestra capacidad cognoscitiva. La teoría de las Ideas de Platón es el eje principal de su obra, esta no se encuentra formulada como tal en ninguna de sus obras, sino tratada, desde distintos ángulos, en varias de sus obras de madurez, como el Fedón, el Fedro y la República. Mediante esta teoría Platón establece su posición metafísica, en la que distingue dos modos de la realidad: los que denomina mundo sensible y mundo inteligible. Esta defensa de la existencia de dos realidades se denomina dualismo ontológico. El mundo sensible es el mundo de las cosas materiales y, como tal, posee las mismas características que la materia, esto es, está sometido a cambio, a movimiento, a generación y corrupción. Se trata del mundo que nos muestran los sentidos y se corresponde con el mundo que siglos antes describía el filósofo presocrático Heráclito; mas para Platón este es el mundo de las apariencias. Frente a este mundo cambiante que nos muestran los sentidos, coloca Platón el Mundo Inteligible. Este Mundo estará conformado por las Ideas de las cosas (las esencias o Formas de las cosas que percibimos en el mundo sensible). Ahora bien, ¿qué es la esencia? La esencia es aquello que una cosa es, aquello que la define; pensemos por ejemplo en una silla, su esencia es la de ser un objeto que sirve para sentarse. Las características de las Ideas son las que siguen:

  1. Las Ideas son inmutables o imperecederas. Cada una de ellas tiene las mismas características que el ser de Parménides.
  2. Existen tantas Ideas como especies de cosas: existe así la Idea de árbol, de hoja, de caballo, entre otras.
  3. Las ideas son independientes, están en un mundo separado. No son algo que tengamos en la mente, pues existen independientemente de si pensamos o no en ellas.
  4. Las Ideas están jerarquizadas, esto es, hay unas Ideas más importantes que otras. . Esta jerarquía es para Platón la siguiente:
  1. La primera idea, la que ilumina todas las demás, es la Idea de Bien, pues esta, como el sol hace en la tierra, ilumina al resto de las Ideas. La idea de Bien es pues la causa de la existencia de toda la realidad, tanto de las otras ideas como del mundo sensible. Así mismo, la Idea de Bien será también el principio del conocer, esto es, la que posibilita el conocimiento de las otras ideas y del mundo sensible. Por esta razón, los cristianos querrán ver en ella la idea de su Dios creador; así, para los neoplatónicos la Idea de Bien será empleada con el nombre de Un y Agustín de Hipona se servirá de ella para explicar el conocimiento como resultado de la iluminación divina.
  2. Después se encontrarían las Ideas de objetos estéticos y éticos.
  3. En tercer lugar se encontrarían las ideas de objetos matemáticos, como la idea de número o la idea de figuras geométricas (Idea de círculo o triángulo).
  4. Finalmente se encontrarían las Ideas de cosas como can, árbol, hoja o humano.

Las Ideas son la causa de las cosas, las esencias de las cosas, por lo que con Platón aparece la primera explicación del mundo físico que afirma como causa del una realidad inmaterial, no física. Debemos resaltar que todas las respuestas de los presocráticos al problema de la Physis fueron unas respuestas materiales, ya que el arjé que proponían como causa de la naturaleza era un arjé material.

Descartes: el problema del método y la evidencia del cogito

El problema con el método

René Descartes, a menudo considerado el padre de la filosofía moderna, se enfrentó a la necesidad de establecer un nuevo método de conocimiento debido a la crisis de escepticismo que dominó la filosofía en el siglo XVII. La ciencia y la filosofía de la época estaban inmersas en la incertidumbre y los conflictos de opinión, lo que llevó a Descartes a buscar una base sólida e indudable para el conocimiento.

Para resolver el problema del método, Descartes desarrolló lo que se conoció como»duda metódic», una forma sistemática de cuestionar todas las creencias hasta encontrar algo absolutamente cierto. Describió este enfoque en detalle en su obra Discurso sobre el método (1637) y lo explicó con más detalle en Meditaciones metafísicas (1641).

La duda metódica implica considerar falsas todas las creencias de las que se puede dudar razonablemente. Descartes empezó dudando de los sentidos, que pueden engañarnos, y de las verdades matemáticas, imaginando un»genio malign» capaz de engañarnos en todo.

La evidencia del Cogito

Aplicando rigurosamente su duda metódica, Descartes llegó a una única certeza indudable: la existencia misma del acto de dudar. Formuló esta certeza con la famosa expresión»Cogito, ergo su» «Pienso, luego exist»).

1. Cogito como Fundación Inquebrantable

La evidencia del cogito se basa en la percepción de que, aunque se dude de todo, la duda misma implica la existencia de un sujeto pensante. El cogito es, por tanto, una verdad evidente e indudable. Descartes se da cuenta de que mientras piensa, aunque dude, debe existir para realizar este acto de pensamiento.

2. Fundamento del Conocimiento

Descartes utiliza el cogito como punto de partida para reconstruir el conocimiento. Con la certeza de la existencia del yo pensante, busca garantizar otras verdades indudables, incluida la existencia de Dios y del mundo exterior. El cogito sirve como base firme sobre la que se puede erigir todo el edificio del conocimiento.

3. La Naturaleza de la Subjetividad

El descubrimiento del cogito subraya la importancia de la subjetividad en la filosofía moderna. El conocimiento comienza con la certeza subjetiva de la propia existencia, trasladando la confianza de los sentidos externos a la certeza interna de la conciencia.

Conclusión

Descartes revolucionó la filosofía al introducir un método riguroso de la duda y establecer la evidencia del cogito como primera certeza indudable. Su enfoque metódico y énfasis en la subjetividad allanaron el camino para el desarrollo de la filosofía moderna, influyendo profundamente en los pensadores posteriores. La duda metódica y el cogito representan la búsqueda cartesiana de una base sólida para el conocimiento, alejándose de las incertidumbres y confusiones que marcaron la filosofía anterior.

Crítica de la Cultura Occidental según Nietzsche

Friedrich Nietzsche, uno de los pensadores más provocadores e influyentes del siglo XIX, realizó una crítica profunda y multifacética de la cultura occidental. Sus reflexiones abordan diversos aspectos, desde la religión y la moralidad hasta la filosofía y el arte, proponiendo una reevaluación radical de los valores que sustentan la civilización occidental.

Crítica a la Religión Cristiana

1. Muerte de Dios

Nietzsche declara la»muerte de Dio» como una metáfora de la decadencia de la influencia de la religión cristiana en la vida moderna. Este hecho implica la pérdida de un fundamento absoluto para la moralidad y los valores, dejando un vacío que necesita ser abordado.

2. Moral de Esclavo

Critica el cristianismo por promover una»moral de esclav», que exalta la humildade, la sumisión y el sufrimiento, en oposición a los valores de la vida y la afirmación del poder y la vitalidad. Para Nietzsche, esta moralidad niega los instintos naturales y la fuerza vital de los individuos.

Crítica a la Filosofía Occidental

1. Platonismo

Nietzsche ve en la filosofía de Platón el inicio de una tendencia devaluadora de la realidad material en favor de un mundo ideal y trascendente. Esta dicotomía entre el mundo sensible y el mundo de las ideas se perpetuó en la tradición filosófica y religiosa occidental.

2. Racionalismo y Moralidad

Considera que la filosofía occidental, en general, priorizó excesivamente la razón y la moralidad objetiva, lo que llevó a una alienación de los instintos vitales y una imposición de valores universales que no respetan la diversidad de la vida humana.

Crítica a la Moralidad

1. Genealogía de la Moral

En su obra La Genealogía de la Moral, Nietzsche explora los orígenes históricos y psicológicos de los valores morales. La moralidad tradicional es vista como una construcción que sirve a los intereses de los débiles para controlar a los fuertes.

2. Voluntad de Poder

Propone la»voluntad de pode» como el principio fundamental de la vida, un impulso inherente a todos los seres vivos para crecer, expandirse e imponerse. La moralidad debe ser reconsiderada a la luz de este principio, promoviendo valores que afirmen la vida y la creatividad.

Conclusión

La crítica de Nietzsche a la cultura occidental es una llamada a repensar los fundamentos de la civilización, cuestionando las estructuras de poder, los valores morales y la visión de la vida impuesta por siglos de tradición filosófica y religiosa. Su filosofía insta a la creación de nuevos valores que afirmen la vida y promuevan el desarrollo pleno del potencial humano, marcando un punto de inflexión en el pensamiento contemporáneo.

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