(Aristóteles
) El ser humano aspira a la felicidad, en su “Ética a Nicómaco” afirma que la actividad humana perfecta es la theoria, es decir, la vida teórica, la que conlleva la contemplación de la verdad. Esto se consigue con un hábito, es decir, una repetición de actos para conseguir las virtudes intelectuales (como estudiar todos los días). Pero esto es difícil de conseguir, por eso hay una felicidad imperfecta o de segunda categoría, que es en la que consiste las virtudes éticas que se alcanzan por el término medio, entre un exceso y un defecto, en los cuales consistía el vicio. Por ejemplo, la valentía sería la virtud justa entre la cobardía (defecto) y la temeridad (exceso). El término medio es la llamada prudencia, que se consigue renunciando a las personas que nos ciegan, tanto como por exceso, como por defecto; para conseguir esto hay que tener los medios de vida necesarios (dinero, prosperidad, amigos…). Por lo tanto, la felicidad es un difícil equilibrio o armónía en nuestras propias vidas y es relativa a cada uno, así que cada cual tiene que saber sus propios límites. Estos se conocen experimentando con nuestra propia vida, por ejemplo, un luchador necesita comer más carne que una persona que no lucha. La doctrina de Aristóteles sobre la felicidad tuvo gran influencia sobre el pensamiento filosófico posterior que llega a nuestros días, distinguíéndose hoy en día entre actos voluntarios, es decir, intencionales de los actos involuntarios, no intencionales.

HEDONISMO

ESTOICISMO “Sustine et abstine” lema de la escuela. El estoicismo basa la autosuficiencia y el menosprecio de los bienes materiales y el desdén hacia lo convencional, por eso determinan vivir de acuerdo a la naturaleza, ya que el futuro es incierto. Solamente el sabio conoce la concatenación de causas y efectos. Por eso, la virtud se alcanza a través de la autarquía y la apatía o indiferencia del devenir del cosmos que es infinito, y como seres finitos que somos, seremos virtuosos cuando nos damos cuenta de ese hecho. Por eso la persona es sabia cuando se hace libre, cuando acepta el destino universal regido por el logos inconmensurable. La virtud es aceptar ese orden necesario que se divide en física y en lógica, por eso el necio se resiste a su destino y el devenir natural. Destacando que el sabio es el único ser humano bueno, el que conoce el orden armónico del mundo: la ética y la estética se equiparan en un mismo aspecto. En resumen, la autarquía, la imposibilidad y la aceptación tranquila del destino trágico del cosmos nos llevan a amar a la comunidad humana sin distinción de ninguna clase, ya que todos participan en el logos universal. El estado universal (cosmopolitismo) busca la felicidad de todo el colectivo humano. Concluyendo en que el sustine et abstine es muy difícil de conseguir en esta vida, pero no podemos vivir sin ideales.

D. Hume-Empirismo MORA–
Para él la moral no es una cuestión de razón, sino de sentimiento por eso establece el emotivismo moral: «la razón es esclava de las pasiones». Con lo cual hace una crítica al Racionalismo moral(ética antigua) que establecía a la razón como criterio moral como fundamental  y se sustituye por la supuesta SENSIBILIDAD MORAL de la especie humana que es común a todo los individuos de esta frente a la percepción de un hecho por ejemplo (un asesinato) se puede valorar de diferentes formas ya sea en defensa propia homicidio involuntario o ejecución de una sentencia judicial. La valoración viene a posteriori nunca a priori, como establecía el Racionalismo. De ahí la novedad de la llamada imposibilidad de pasar del «ES AL DEBE» , es decir, la razón nunca puede llevarnos al origen de la moralidad sino sólo nuestra sensibilidad moral; esto fue lo que llevó Kant a establecer una ética formal.
Por último señalar que lo que nos hace humanos realmente es la llamada SYMPATHEIA o SIMPATÍA es decir el deseo de la felicidad colectiva o el anhelo ante el sufrimiento de los demás que en el fondo no es más que un deseo egoísta o UTILITARISTA ya que lo bueno es lo que resulta útil para la sociedad en la que vivimos lo que nos beneficia a todos es el llamado INTERÉS GENERAL de su coetáneo Adam Smith.
 

S MILL-UTILITARISMO ÉTICO SOCIAL S XIX–
Mill aboga en toda su obra contra el poder de la sociedad como un colectivo totalitario y populista, que ponga en peligro el desarrollo de la persona en toda su amplitud y que el verdadero valor de la ética consiste en hacernos ver, que la persona no se desarrolla al margen de la sociedad en la que vive, no debe tolerar que esa sociedad oprima sus derechos y libertades en esto consiste el PENSAMIENTO CRÍTICO que siempre es individual y no colectivo. La única razón por la cual el poder de la sociedad puede ser ejercido es para evitar que se perjudique a los demás. Hay que llevar a término la regla de oro: «mi libertad termina donde empieza la de los demás». Esta inviolable individualidad comprende tres tipos de libertades:
libertad de conciencia (freedom), autocontrol sobre mi conciencia, que se divide mi libertad de pensamiento (pensar o creer lo que yo quiera sobre cualquier) ; y la libertad de expresión que conlleva la libertad de expresar lo que yo quiera y a su vez la libertad de prensa. La libertad de acción que consiste en determinar mi propio plan de vida, soy libre para elegir la vida que yo quiera.

Libertad de asociación

Puede asociarse con cualquiera para defender mis derechos y libertades , libertad de manifestación; puedo expresar en la vida pública todos mis desacuerdos con las leyes impuestas por la mayoría. En conclusión, el pensamiento de Mill refuerza la democracia liberal y el estado de bienestar 

HABERMAS; LA ÉTICA DEL DISCURSO-

Moral preconvencional-Moral convencional-Moral postconvencional

SARTRE: UNA MORAL EXISTENCIALISTA–
En el existencialismo ético el hombre no es otra cosa que lo que él hace y es el primer principio del humanismo existencialista. «En el Ser y la Nada» aparece la conciencia como una construcción social con una dialéctica entre el «en sí»: que es el momento de constituir mi yo, pues necesitamos a las cosas, a lo externo, por eso lo llamó «LO EN SÍ«, que el contenido de la consciencia que en sí misma está vacía, es la nada. «LO PARA SÍ» es la conciencia negada por sí misma, sin las cosas que son los objetos, es la nada, el vacío absoluto. Por eso hace falta un tercer término que haga la síntesis entre el «EN SÍ» y «PARA SÍ», «el ser para el otro»: en «Mi Yo» rebelando la relación en que el otro se me da no como objeto sino como sujeto. De ahí la noción de compromiso, para llenar el vacío, la angustia que nos produce el ser y no caer en la nada. En «El existencialismo es un humanismo» el hombre no tiene esencia solo existencia, por eso dice que la existencia precede a la esencia, la mala fe es tratar de eludir la angustia de decidir por nosotros mismos. No hay consuelos metafísicos, no hay Dios, estamos solos en el mundo es así; esto es la autenticidad, negarse a ello es tratar de evitar los dilemas morales. En el materialismo histórico describe como las condiciones materiales de la producción, determinan el ámbito social, político e ideológico y esto significa que determina la conciencia. La nueva racionalidad social es la nueva razón dialéctica para construir un nuevo Marxismo donde se dé cabida a las relaciones de producción en sintonía con las nuevas necesidades humanas, que es el conocido Euromarxismo.

Nietzsche Y LA TRANSMUTACIÓN DE LOS VALORES–
Nietzsche establece la muerte de Dios señalando la desaparición de los valores tradicionales de la cultura occidental sustituyendo a Dios por el hombre, por eso dice que hay solo dos tipos de personas: ● La moral de los señores, los fuertes, los distinguidos, los que no aceptan las normas establecidas. Sus valores son la plenitud, el poder,la fuerza, la disciplina, la confianza. ● La moral de los esclavos que son los débiles, plebeyos, vulgares. Siendo sus valores la compasión, la piedad, el amor al prójimo.