05 Oct

Estadio Sensoriomotor

Introducción

En el periodo sensoriomotor, que abarca los dos primeros años de vida, se adquiere la permanencia del objeto, la comprensión de que los objetos existen aunque no los veamos ni actuemos sobre ellos. Las conductas características de este estadio son:

  • Egocentrismo: Incapacidad para pensar en objetos o acontecimientos desde el punto de vista de otro sujeto.
  • Circularidad: Repetición de actos. Se producen tres tipos de reacciones circulares: primarias, secundarias y terciarias.
  • Experimentación: Aparece en la reacción circular terciaria y se considera un determinante fundamental del aprendizaje en la primera infancia.
  • Imitación: Implica copiar una acción de otro sujeto o reproducir un acontecimiento.

Subestadios del Periodo Sensoriomotor

Estadio 1 (0 – 1 mes)

La dotación del neonato se basa en los reflejos y su capacidad de acción. El uso de los reflejos produce algunos cambios en los reflejos innatos como consecuencia de las acciones.

Estadio 2 (1 – 4 meses)

Más allá de los reflejos, aparecen los primeros hábitos. Se producen modificaciones en las formas de hacer frente a objetos similares. Se produce acción sin intención. El bebé adquiere otras coordinaciones como girar la cabeza hacia el lugar del que procede un sonido interesante. En torno a los 4 meses, el bebé consigue la coordinación visomotora u ojo-mano, crucial para la objetivación del mundo y para la acción del bebé sobre él. En este estadio se da la reacción circular primaria, que consiste en conductas centradas en el propio cuerpo del bebé.

Estadio 3 (4 – 8 meses)

El logro característico es la formación de las primeras estructuras adquiridas: los hábitos. La asimilación se produce sobre los objetos y sobre los efectos causados socialmente. Cuando el adulto produce algún “espectáculo interesante” para el niño, este llora o balbucea para que se vuelva a repetir. La conducta se repite tal como se aprendió.

Estadio 4 (8 – 12 meses)

Cuando un esquema previo no resulta efectivo, el niño prueba otro y por tanteo llega a la respuesta correcta. Se produce el error del estadio 4, que consiste en buscar un objeto en el lugar donde se encontró por última vez, incluso si el niño ha visto que se lo trasladaba a otro lugar.

Estadio 5 (12 – 18 meses)

Aparece la reacción circular terciaria, que consiste en la búsqueda activa de nuevos medios para alcanzar un objetivo. El niño experimenta con diferentes acciones para ver qué efectos producen.

Estadio 6 (18 – 24 meses)

A través de los esquemas, el niño va elaborando su conocimiento de los propios objetos y de las relaciones espaciales y causales que los conectan. Al final del estadio, dispone de esquemas de acción interiorizados, representaciones, que sustituyen a las manipulaciones propias del subestadio anterior. Esta capacidad no solo multiplica las posibilidades de experimentar en el medio, sino que la inteligencia opera cada vez más a nivel simbólico.

El Código Genético y el Desarrollo

En nuestro código genético se pueden distinguir dos tipos de contenidos:

  • Cerrados: No alterables como consecuencia de la experiencia individual. Nos definen como especie y solo se alteran por largos procesos filogenéticos. Nuestras características morfológicas (cerebro, orejas, etc.) y nuestro calendario madurativo (ej. la pubertad) son características cerradas.
  • Abiertos: Tienen que ver con las posibilidades de adquisición y desarrollo que están como potencialidades (ej. el lenguaje). La parte cerrada del código establece un calendario madurativo: un niño de dos meses no puede producir lenguaje articulado, pero cuando las bases biológicas están listas, la adquisición depende de la interacción del niño con su entorno.

Deja un comentario