13 Nov

Desarrollo de la Autonomía en Niños

Hábitos de Autonomía

Los hábitos de autonomía son un repertorio de comportamientos o habilidades que el niño adquiere en interacción con el medio, para resolver por sí mismo las actividades y rutinas que requiere la vida cotidiana y poder colaborar con los demás en dichas actividades. Se desarrollan sistemáticamente y en diferentes contextos. Su adquisición permite que el niño sea autónomo, tenga mayores capacidades y posibilidades de integración en contextos más amplios. Se adquieren a través de las rutinas.

En el proceso de enseñanza-aprendizaje de hábitos de autonomía se debe tener en cuenta el nivel madurativo.

Las técnicas más apropiadas para la enseñanza de hábitos de autonomía son: refuerzo positivo, modelado, moldeamiento, autoinstrucciones, encadenamiento, economía de fichas, técnica de Premack.

Proceso para la enseñanza de los hábitos de autonomía:

  • Presentar
  • Practicar
  • Supervisar
  • Consolidar

Higiene Personal

La adquisición de hábitos de higiene y control de esfínteres es fundamental para prevenir enfermedades y facilitar la inserción social del niño.

El aseo personal y el control de esfínteres son concordantes con la maduración y hacen que el niño se sienta limpio y autónomo. La higiene implica el aseo personal y el control de esfínteres.

Alimentación

La alimentación es una necesidad fisiológica que, además, supone un momento de relación, comunicación y adquisición de hábitos.

  • Comer todo tipo de alimentos
  • Comer solo
  • Utilizar los diferentes cubiertos
  • Respetar las normas
  • Colaborar en los preparativos y en la recogida

Vestido

Ponerse y quitarse prendas de ropa y calzado, el cuidado de su vestuario, el orden y la colocación de las prendas, la elección adecuada de prendas y calzado en función del clima, el momento o la actividad.

Sueño

El sueño es una necesidad fisiológica y, además, es fundamental para la maduración neurológica, la memoria, el aprendizaje y para fortalecer el sistema inmunológico. Debe ser adquirido desde el nacimiento ya que los cambios se producen durante el primer año de vida. Los indicadores son:

  • Capacidad para conciliar el sueño de manera autónoma
  • Conciliar el sueño en su habitación
  • Ser capaz de regularizar un horario fijo de sueño
  • No despertarse sin que exista causa aparente

Orden

Cuidar y recoger los materiales y juguetes, colaborar en tareas sencillas, mantener el orden en el aula y en su habitación, preparar y organizar sus cosas, anticiparse a ciertas rutinas.

La organización de actividades en torno a rutinas favorece la adquisición del hábito. (2-3 años) Favorece:

  • El control de sí mismo
  • La autonomía
  • El equilibrio personal
  • La convivencia

El procedimiento es presentar, practicar, supervisar, consolidar.

Habilidades Sociales

Las habilidades sociales son las conductas necesarias para interactuar y relacionarse con los iguales y con los adultos de forma efectiva y mutuamente satisfactoria. Si el niño adquiere estas conductas y las realiza de acuerdo a las normas de un determinado contexto social se dice que ha adquirido competencia social. Esta relacionada con el éxito escolar y social y con el ajuste personal.

Niño Socialmente Hábil

Un niño socialmente hábil:

  • Es más sociable
  • Aumenta el rendimiento académico
  • Establece más interacciones y de mayor calidad
  • Da respuestas sociales adecuadas
  • Obtiene más refuerzos sociales y mayor aceptación de los demás
  • Mejora su autoestima

Niño Socialmente Inhábil

Un niño socialmente inhábil:

  • Recibe menos refuerzos sociales
  • Manifiesta conductas de tipo agresivo
  • Experimenta sentimientos de frustración
  • Presenta una baja autoestima

Las habilidades sociales se adquieren a través del aprendizaje en un marco de interacción social que es bidireccional y recíproco. Responden a situaciones concretas y son conductas que los niños hacen, sienten y piensan.

Inés Monjas: Programa de Enseñanza de Habilidades de Interacción Social. PEHIS.

  • Área 1: Habilidades básicas de integración social.
  • Área 2: Para hacer amigos.
  • Área 3: Conversacionales.
  • Área 4: Relacionadas con las emociones, sentimientos y opiniones.
  • Área 5: De solución de problemas interpersonales.
  • Área 6: Para relacionarse con los adultos.

Educación en Valores

El desarrollo moral implica el conocimiento de estos valores y normas y el desarrollo de conductas acordes con ellos, lo que le permitirá adaptarse a diferentes contextos y participar activamente en la sociedad. Favorece el desarrollo moral.

  • Tiene como finalidad el que los niños aprendan a ser tolerantes, dialogantes y responsables.
  • Supone educar en valores como la cooperación, la justicia, la solidaridad…
  • Supone desarrollar las capacidades que se precisan para convivir con los demás y participar de forma responsable en la sociedad.

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