20 Ene

El Arte en la Antigua Grecia: Un Legado Imperecedero

Etapas Fundamentales del Arte Griego

El arte griego se desarrolló a lo largo de varios siglos, dejando una huella imborrable en la historia del arte occidental. Se distinguen tres periodos principales:

  1. Periodo Arcaico (776 a.C. – 480 a.C.): Comienza con la Primera Olimpiada y finaliza con las Guerras Médicas. Los artistas buscaban una técnica propia, con formas simples y contenidas. En arquitectura, se introduce el uso de la piedra y se establecen los órdenes dórico y jónico.
  2. Periodo Clásico (Siglo V a.C. – Muerte de Alejandro Magno): Se caracteriza por la búsqueda de la belleza serena, la perfección, la medida y la armonía. Alcanza su apogeo en la segunda mitad del siglo V a.C., tras las Guerras Médicas, coincidiendo con la época de Pericles y la hegemonía de Atenas.
  3. Periodo Helenístico (Muerte de Alejandro Magno – 146 a.C.): Se extiende hasta la toma de Corinto por Roma. Se observa un deseo de expresión vital y el realismo prevalece sobre el idealismo. La serenidad idealizada de las esculturas clásicas da paso a la tensión, el movimiento, los estados de ánimo violentos, la vejez y la enfermedad.

Arquitectura Griega: Órdenes y Templos

Los Órdenes Arquitectónicos

La arquitectura griega se define por sus tres órdenes principales, cada uno con características distintivas:

  • Orden Dórico: El templo se erige sobre un basamento de tres escalones, el último llamado estilóbato. La columna carece de basa, y el fuste, con acanaladuras amplias, se apoya directamente sobre el estilóbato. El capitel, a través del collarino, se compone del equino (moldura convexa) y el ábaco (en forma de dado). El entablamento, adintelado, presenta un arquitrabe liso y un friso dividido en triglifos y metopas. El conjunto se remata con un frontón triangular, cuyo interior, el tímpano, puede estar decorado. Se aplicaban deformaciones para dar mayor anchura a las columnas de los extremos, curvatura central del entablamento y estilóbato, desigual distancia entre intercolumnios y ensanchamiento del fuste (éntasis).
  • Orden Jónico: Más estilizado, la columna tiene basa. El fuste, más delgado que en el dórico, presenta 24 acanaladuras profundas. El capitel se compone de un equino con volutas en los extremos y ovas en el interior. El ábaco es más estrecho y fino. El entablamento consta de un arquitrabe de tres bandas horizontales y un friso corrido. La cornisa está decorada con ovas, y el remate es un frontón con esculturas (acróteras).
  • Orden Corintio: Variante del jónico, se diferencia en el capitel, formado por dos filas de hojas de acanto y volutas reducidas en las esquinas. A veces, las columnas se sustituyen por esculturas femeninas (cariátides).

El Templo Griego: Casa de la Divinidad

El templo, edificio fundamental de la arquitectura griega, evolucionó de estructuras de madera o adobe a construcciones de mármol a partir del siglo VII a.C. Su estructura inicial, una habitación, se complejizó con pórticos de columnas, esculturas y pinturas.

El templo, unidad cerrada, albergaba la estatua del dios, mientras que las ceremonias de culto se realizaban al aire libre, alrededor de un altar exterior. La planta usual era rectangular. Los templos más antiguos, llamados in antis, tenían una cámara precedida por una galería con dos columnas. Se distinguen tres partes:

  • Naos: Contiene la estatua del dios.
  • Pronaos: Pórtico abierto a la entrada de la naos, adornado con columnas.
  • Opistodomos: Extremo opuesto al pronaos, sin comunicación con la naos, servía como cámara del tesoro.

Los templos se clasifican según el número de columnas en su fachada:

  • 2 – in antis
  • 4 – tetrástilos
  • 6 – hexástilos
  • 8 – octástilos
  • 10 – decástilos
  • 12 – dodecástilos

Y según la disposición de las columnas:

  • Próstilo: Columnas solo en la fachada principal.
  • Anfipróstilo: Columnas en ambas fachadas.
  • Períptero: Una fila de columnas rodea el templo.
  • Díptero: Dos filas de columnas rodean el templo.

Principales Construcciones

  1. Periodo Arcaico (Siglos VII y VI a.C.): Predominan los templos dóricos, como el dedicado a Apolo en Corinto.
  2. Periodo Clásico (Siglo V a.C.): Atenas se convierte en el centro artístico. La arquitectura alcanza su madurez, con equilibrio entre los órdenes dórico y jónico. La obra maestra es el Partenón, construido por Ictinos y Calícrates entre 447 y 432 a.C., un templo octástilo y períptero dedicado a Atenea. La naos tiene tres naves, y en su fondo se encontraba la estatua criselefantina de la diosa, realizada por Fidias. En el opistodomos se guardaba el tesoro de la diosa y el tesoro público. Fidias también dirigió la decoración de los relieves del Partenón.
  3. Periodo Helenístico: La arquitectura se diversifica, con funciones religiosas, civiles y culturales. Se caracteriza por el colosalismo, el contraste entre luz y sombra, y el predominio del orden corintio. Un ejemplo notable es el Templo de Zeus en Atenas.

La Escultura Griega: Del Arcaísmo al Helenismo

En Grecia, la contemplación estética se libera, y el hombre se convierte en el eje del arte, con un enfoque antropomórfico. La belleza formal, idealizada, es fundamental. Las principales manifestaciones escultóricas son los relieves que decoran los templos y las esculturas de bulto redondo, que representan héroes y dioses.

La escultura evoluciona desde obras en madera hasta piezas en mármol y bronce.

1. Época Arcaica (Siglos VII y VI a.C.)

A finales del siglo VII a.C., aparecen los kuroi (jóvenes atletas) y las korai (doncellas). Los kuroi se caracterizan por la sonrisa arcaica, el antinaturalismo, las formas poligonales, la rigidez, la frontalidad y los rasgos orientalizantes. Las korai, a menudo oferentes, presentan un ligero estrechamiento en la cintura y un abultamiento en el pecho.

2. Estilo Arcaico Tardío (Siglos VI y V a.C.)

Se caracteriza por la gravedad en los rostros. Se busca abandonar la rigidez y se tiende a modelos naturalistas idealizados, con un intento de dotar a las figuras de movimiento natural. Se utiliza el bronce y el ropaje, y la proporción es de 7 cabezas.

3. Época Clásica

  • Mirón: Interesado en el cuerpo humano en movimiento. Su obra más famosa es el Discóbolo, que representa a un atleta lanzando el disco.
  • Policleto: Teórico de la escultura, para él, el cuerpo humano es número y proporción. Su obra más conocida es el Doríforo, que representa su canon: la altura del cuerpo debe ser 7 veces la de la cabeza.
  • Fidias: Culmina la búsqueda de la belleza ideal. Su obra cumbre es la decoración del Partenón:
    • Frontón oriental: Nacimiento de Atenea.
    • Frontón occidental: Disputa entre Atenea y Poseidón por Atenas. Se utiliza la técnica de los paños mojados.
    • Friso interior: Procesión de las Panateneas.
    • Metopas: Escenas de lucha, con la colaboración de sus discípulos.
    • Esculturas de bulto redondo: Tres estatuas de Atenea.

4. Clasicismo Tardío

Se caracteriza por un mayor movimiento, exageración y complejidad.

  • Praxíteles: Sus figuras tienen gracia y blandura femenina, con una curva característica. Su obra cumbre es Hermes con Dioniso niño. Destaca también la Venus de Cnido (370 a.C., Venus púdica).
  • Scopas: Interesado en la pasión violenta y temas trágicos. Sus obras tienen una postura antinatural y utiliza la técnica de los paños mojados. Ejemplo: Ménade.
  • Lisipo: Trabajó en bronce y modificó el canon de Policleto a 8 cabezas. Sus esculturas tienen múltiples puntos de vista. Su obra cumbre es el Apoxiomenos, un joven atleta limpiándose el sudor y el aceite.

5. Época Helenística

Se abandona el canon de proporcionalidad y la idealización expresiva. Se acentúa el movimiento y se exploran temas cotidianos. Se sustituye el ethos por el pathos, con un enfoque en el contenido pasional y violento.

Obras principales: Galo moribundo, Venus de Milo, Victoria de Samotracia, Laocoonte y sus hijos.

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