• El personaje en sí es paródico y ridículo: frente a los héroes jóvenes y apuestos de las novelas de caballerías, tenemos a un anciano loco que va acompañado de un campesino de poca sal en la mollera (Sancho Panza) que va en burro. La armadura es de sus bisabuelos, por lo que irá vestido anacrónicamente, siguiendo un estilo que estaría de moda un siglo antes: Rocinante es todo piel y huesos.

• Don Quijote enloquece por leer tantas novelas de caballerías. Su locura produce dos consecuencias inmediatas: cree que todo lo que ha leído en los libros de caballerías es cierto y piensa en la posibilidad de resucitar la orden caballeresca.

• Frente a los lugares fabulosos (reales o imaginados) de las novelas de Caballerías (Gaula, Grecia, Hircania, Tracia…), don
  Quijote es señor de La Mancha, acaso la zona más árida y desértica de la Península Ibérica.

• Su amada no es una bella princesa, sino una mujer de aldea (Aldonza Lorenzo) a la que ve por primera vez persiguiendo a un cerdo.

• En casi todas las aventuras acaba mal parado.

• Aparecen personajes fantásticos que no lo son en realidad.
  

• En la obra predomina el humor y la comicidad: afán paródico en los nombres de los personajes fantásticos o en los títulos de algunos episodios o el ejemplo de chistes o juegos de palabras.

• El lenguaje utilizado por Don Quijote: utiliza a veces un estilo pomposo, grandilocuente, arcaico ya en su época.

3. Historia de una amistad: entre Don Quijote y Sancho, esa relación de amistad va creciendo y se va consolidando a lo largo de la obra, los dos comparten complicidades, diálogos y se transmiten un profundo respeto y afecto.

4. Reflexión sobre la defensa de los ideales (idealismo), frente a la vulgaridad y monotonía de la vida cotidiana, la literatura y la imaginación ofrecen a Alonso Quijano la posibilidad de una existencia más noble, en la que tengan cabida el heroísmo, la libertad y la justicia. Don Quijote representa al individuo que lucha por sus ideales, pero choca con la realidad. (Dificultad que encierra la realización de los ideales humanos) De ahí su locura, pero también su grandeza, pues con su acción pretende no sólo el éxito personal, sino también transformar todo aquello que no le gusta y no le parece bien. Cree en la utopía de un mundo mejor en el que existía la bondad, la justicia, la libertad, la fraternidad, la generosidad… Por eso sus fracasos, aun tratados con humor, producen tristeza y melancolía. En la novela se ensalza al ser humano que lucha por unos ideales nobles, sin desánimo ante la adversidad. El Quijote se erige así en el mayor homenaje que nunca se ha hecho al ser humano, a su derecho a soñar y a su libertad para hablar (la libertad como el eje del Quijote: los personajes nacen y viven en absoluta libertad, pueden decidir lo que quieren ser (Don Quijote), inventan a los demás (Dulcinea), no tienen pasado ni ataduras que los condicionen, son dueños de su propia realidad…) Identifica la locura con la verdad y la libertad: el personaje loco, Don Quijote, es en el fondo, el más cuerdo, el que ve las cosas como deberían ser, y el más libre para decir lo que piensa.

5. El desengaño, el choque entre las fantasías o ideales de Don Quijote y la realidad provoca en el protagonista una profunda decepción, que tiñe de melancolía la segunda parte de la obra. Don Quijote simboliza al individuo que lucha por sus ideales, pero choca con la realidad. La muerte de Don Quijote significa el desengaño y la imposibilidad de cumplir sus sueños. Tras las aventuras y burlas, se vislumbra una realidad triste y amarga. Nos reímos de los disparates del caballero: pero también sentimos la tristeza al ver fracasar su intento de realizar unos ideales nobles que deberían ser posibles. La obra es un alegato sobre lo difícil que es vivir un gran ideal en medio de una realidad miserable.

6. La descripción de la España de la época, hay en la novela una profunda crítica social, la obra es un documento social extraordinario de la España de laçépoca. Don Quijote no se mueve en un mundo imaginario, sino en ámbitos de la realidad, que entra en el relato con sus costumbres y con el bullicio de las gentes más variadas. La sociedad que se refleja es, a veces, explícita o implícitamente criticada, necesita de la acción utópica del caballero.

RECURSOS TÉCNICOS DEL “Quijote”: El Quijote presenta recursos técnicos novedosos para la narrativa de su tiempo, aunque resulta habituales en la novela contemporánea. Principales recursos:

1. Figura del narrador:
   Cervantes juega a despistar al lector y finge no ser el autor de la obra. Cervantes presenta la historia como si hubiera sido inventada por un autor árabe, Cide Hamete Benengeli, y traducida después al castellano. Cervantes dice que él se encontró la obra por casualidad y la mandó traducir del árabe. En la obra hay en realidad dos narradores: uno, sin nombre, en primera persona, y otro, el narrador llamado “Cide Hamete Benengeli”. Se produce un juego entre ambos, en que el primero comenta, valora y a veces se burla del otro. Tenemos por lo tanto a un escritor (Cervantes) que inventa otro personaje (Alonso Quijano)

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