30 Jun
EPÍGRAFE 17 HISTORIA (SIGLO XX) – EL BIENIO RADICAL-CEDISTA Y EL TRIUNFO DEL FRENTE POPULAR
INTRODUCCIÓN
Fue un período marcado por el dominio político de la derecha y la CEDA. Este tiempo se caracterizó por tensiones y conflictos políticos intensos, culminando en el triunfo del Frente Popular, una alianza de partidos de izquierda, en las elecciones de febrero de 1936. Este cambio de poder fue crucial en el contexto previo a la Guerra Civil Española.
01 EL GOBIERNO RADICAL-CEDISTA
En las elecciones generales de noviembre de 1933, las mujeres votaron por primera vez, resultando en un triunfo de la derecha. La CEDA se convirtió en el partido dominante con 115 escaños, seguida por los radicales de Lerroux (102 diputados) y monárquicos. En consecuencia, la facción radical del PSOE y la UGT, liderada por Largo Caballero y Prieto, se fortaleció.
1.1 LOS GOBIERNOS RADICALES
En diciembre de 1933, Lerroux formó un gobierno en España con miembros del Partido Radical y el apoyo parlamentario de la CEDA. Buscaron una “política de revisión” de las reformas de Azaña. Se detuvo la implementación de la Ley de Congregaciones Religiosas, y se derogó la Ley de Términos Municipales. Además, la reforma agraria fue frenada y se aprobó una Ley de Amnistía para los implicados en el golpe de Estado de Sanjurjo.
Este período estuvo marcado por tensiones en la autonomía regional, especialmente con Cataluña, liderada por Lluís Companys, y el País Vasco, cuyo estatuto no avanzaba. Internamente, el Partido Radical sufrió una escisión, y la izquierda republicana se reorganizó bajo Azaña.
El 4 octubre de 1934, Lerroux formó un nuevo gobierno radical que incluía a ministros de la CEDA, provocando una revolución socialista.
1.2 LA REVOLUCIÓN DE OCTUBRE DE 1934
Liderada por el comité revolucionario socialista de Largo Caballero, comenzó con una huelga general el 5 de octubre. Pretendía establecer un régimen socialista mediante una revolución armada. Sin embargo, en Madrid y otras ciudades, la insurrección fracasó. En Vizcaya, hubo enfrentamientos entre insurrectos y fuerzas del orden. En Cataluña, la Generalitat, bajo Companys, proclamó brevemente el «Estado catalán» dentro de una República Federal Española, siendo reprimida por las fuerzas militares. En Asturias, se desató una violenta revolución obrera liderada por una Alianza Obrera de socialistas, anarquistas y comunistas. Ocuparon la provincia, asaltaron cuarteles y cometieron actos violentos. El general Franco coordinó la represión de la rebelión.
1.3 LA CRISIS DEL BIENIO RADICAL-CEDISTA
Tras la Revolución de Octubre, muchos líderes socialistas, incluido Azaña, fueron encarcelados, y en Cataluña, el gobierno de la Generalitat fue detenido y suspendido su Estatuto de Autonomía. Se autorizó una reforma agraria limitada. Gil Robles incorporó a generales (Franco, Mola…) contrarios a Azaña.
El gobierno radical-cedista se encontraba paralizado por divisiones internas y críticas. La situación empeoró por diferentes escándalos (estraperlo y asunto Nombela) implicando al Partido Radical. Desacreditado, el gobierno de Lerroux cayó. Finalmente, a finales de 1935, Portela Valladares formó un nuevo gobierno sin la CEDA ni los radicales, y disolvió las Cortes, convocando nuevas elecciones para febrero de 1936.
02 EL GOBIERNO DEL FRENTE POPULAR
2.1 LAS ELECCIONES DE FEBRERO DE 1936
En 1936, la izquierda, encabezada por Azaña, plasmó la unidad republicano-socialista. A pesar de las diferencias internas en el PSOE, principalmente con Largo Caballero, se formó el Frente Popular, integrando a Izquierda Republicana, Unión Republicana, PSOE, PCE, UGT, Partido Sindicalista y el POUM. Este bloque se enfocó en retomar las reformas del gobierno de Azaña de 1931-1933 y promover una amnistía para los presos de los sucesos de 1934. La CEDA inició pactos regionales y Renovación Española y los carlistas formaron el Bloque Nacional (liderado por Calvo Sotelo).
A pesar de la victoria electoral del Frente Popular, los desafíos para estabilizar el país fueron enormes, marcados por movilizaciones obreras, demandas sociales y una creciente violencia política.
2.2 LA VUELTA DE AZAÑA AL GOBIERNO
Este gobierno republicano (sin socialistas) implementó medidas como la amnistía para los presos políticos de 1934, la restauración del Estatuto de Autonomía de Cataluña, las organizaciones sindicales movilizaban a los trabajadores y la reactivación de la Reforma Agraria de 1932. El clima político se caracterizó por un aumento de huelgas, disturbios y violencia callejera.
La ilegalización de Falange y el arresto de José Antonio Primo de Rivera agudizaron las tensiones.
En abril, las Cortes destituyeron al presidente Alcalá Zamora, y Azaña fue elegido presidente. Los intentos de formar un gobierno de coalición con los socialistas fracasaron, dando lugar a un gobierno puramente republicano bajo Casares Quiroga.
2.3 LA CONSPIRACIÓN MILITAR Y EL INICIO DE LA GUERRA CIVIL
En 1936, el gobierno español tramitaba el Estatuto del País Vasco, mientras un referéndum en Galicia apoyaba la autonomía, proceso interrumpido por la guerra civil. El país enfrentaba una creciente y violenta radicalización.
Simultáneamente, se preparaba un golpe militar. Mola, el principal organizador, planeó un levantamiento minucioso, con especial énfasis en el ejército de África dirigido por Franco.
El asesinato del teniente José del Castillo y la posterior represalia contra José Calvo Sotelo en julio exacerbó la tensión. La sublevación comenzó el 17 de julio en Melilla, propagándose rápidamente. Para finales de julio, España estaba dividida entre las áreas leales a la República y las zonas sublevadas, marcando el comienzo de la Guerra Civil.
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