EDUCACIÓN: El Naturalismo Pedagógico de Rousseau

La corrupción que experimentamos en la vida cotidiana se debe a la organización actual de la sociedad. Para Rousseau, la solución reside en la educación y la política. Su obra Emilio aborda la educación, proponiendo un método que busca formar al hombre de acuerdo con su naturaleza, evitando la corrupción inherente a la sociedad. Este método se basa en el Naturalismo Pedagógico, que prioriza el desarrollo natural del ser humano, fomentando el amor a sí mismo y al prójimo.

Ámbitos de la Educación

La educación, según Rousseau, abarca tres ámbitos principales:

1. Formación Física: Durante la infancia, los niños deben vivir en el campo, lejos de la familia y la sociedad, para desarrollarse en armonía con la naturaleza.
2. Formación Moral y Religiosa: Comienza en la infancia y se extiende a la adolescencia, inculcando valores morales de forma práctica y promoviendo el desarrollo de sentimientos como el amor propio y la compasión.
3. Formación Política o Civil: Se adquiere viajando y reflexionando sobre diferentes formas de gobierno, permitiendo distinguir lo natural de lo artificial y profundizando en el origen y la constitución de la sociedad.

Principios para la Educación de los Niños

Rousseau estableció principios educativos que aún hoy mantienen vigencia:

• Libertad de Movimiento: Facilitar la libertad física de los niños, permitiéndoles explorar y experimentar.
• Educación Anti-autoritaria: Promover el razonamiento y evitar la obediencia ciega, utilizando castigos como consecuencias lógicas de las acciones.
• Respeto a las Etapas del Desarrollo: Tratar a los niños como tales, respetando su crecimiento y desarrollo evolutivo.
• Educación Basada en Intereses: Partir de los intereses de los niños, promoviendo el aprendizaje a través de la experiencia.
• Evitar la Memorización: Priorizar la formación del juicio sobre la acumulación de conocimientos.

Formación Moral y Religiosa

La educación moral debe desarrollar los sentimientos naturales, comenzando por el amor propio, diferenciándolo del egoísmo. La compasión también juega un papel fundamental. La conciencia, como un sentimiento interior que nos acerca a Dios, se convierte en el juez del bien y del mal.

Rousseau propone una religión natural basada en la razón y la experiencia, en contraposición a la religión sobrenatural. Esta religión natural se centra en la adoración a Dios y el agradecimiento, reconociendo la existencia de un ser superior que ordena el universo.

POLÍTICA: El Contrato Social

Rousseau argumenta que el estado social, aunque no natural al hombre, se ha vuelto indispensable. Su obra El Contrato Social busca una forma de organización que preserve la libertad del estado de naturaleza. Propone un nuevo Contrato Social que genere una voluntad general, distinta de la suma de las voluntades individuales, como base del poder político.

Principios del Contrato Social

• Voluntad General: Una voluntad colectiva que busca el bien común, a la que se someten las voluntades individuales.
• Indivisibilidad de los Miembros: Los miembros de la sociedad son considerados partes indivisibles del todo.

Soberanía y Libertad

La soberanía emana de la voluntad general, siendo indivisible e inalienable. La libertad individual se transforma en libertad civil e igualdad. El soberano es el cuerpo social en su conjunto, mientras que el gobierno reside en el poder legislativo.

La Voluntad General vs. la Voluntad de Todos

Rousseau distingue la voluntad general, que siempre es justa y busca el bien común, de la voluntad de todos, que representa la suma de intereses particulares y puede ser injusta.

Libertad Civil y Moral

La libertad civil, limitada por la voluntad general, es superior a la libertad natural. Con ella, el hombre se convierte en dueño de sí mismo, obedeciendo a la ley que él mismo se prescribe a través de la razón. La verdadera libertad se alcanza obedeciendo las leyes civiles, que son expresión de la voluntad general.

Conclusión

Rousseau, aunque no considerado un filósofo de gran profundidad, ha dejado una huella significativa en el pensamiento occidental. Sus ideas sobre educación y política influyeron en la Revolución Francesa y en movimientos posteriores. Su Naturalismo Pedagógico y su concepto de Contrato Social siguen siendo relevantes en la actualidad.