09 Oct

Introducción

El siglo XVI (Renacimiento) y el siglo XVII (Barroco) son considerados los Siglos de Oro de las artes y las letras españolas, gracias al surgimiento de autores de gran talento. El Renacimiento fue una corriente cultural que revivió la cultura clásica a partir de las ideas del humanismo. Este cambio de visión transformó la percepción del mundo, pasando de ser un lugar de paso hacia la otra vida, a un lugar bello y digno de ser disfrutado, un locus amoenus lleno de belleza.

El Renacimiento surgió en Italia en el siglo XIV y alcanzó su esplendor en Europa durante el siglo XVI.

Influencia Clásica

La influencia de los autores clásicos se aprecia en la literatura renacentista tanto en los temas como en el estilo. El escritor renacentista buscaba armonía y equilibrio para lograr naturalidad y elegancia.

Decadencia a Finales del Siglo XVI

A finales del siglo XVI, el imperio español inicia una decadencia política, social y económica. Durante este periodo, se prohibieron algunos libros contrarios a las ideas del Estado.

Lírica Renacentista

El Renacimiento trajo consigo una profunda renovación de la poesía lírica española, manifestándose principalmente en las formas métricas y en los temas. El artífice de esta renovación fue el poeta Garcilaso de la Vega. Dentro de la lírica religiosa, destacan Fray Luis de León y San Juan de la Cruz.

Primer Renacimiento (Época de Carlos I)

Durante la primera mitad del siglo XVI, se asimilan las ideas y estéticas renacentistas. Es una época de optimismo y apertura a la cultura europea. La cultura adquiere mayor presencia y la religión deja de ser omnipresente. El poeta más importante de este periodo es Garcilaso de la Vega.

Garcilaso de la Vega

Garcilaso de la Vega es plenamente renacentista en los temas de su poesía: el amor, la naturaleza, la mitología, y otros temas clásicos como el carpe diem. Su estilo sigue las características del petrarquismo. La producción literaria de Garcilaso es exclusivamente poética y poco extensa. Garcilaso también adaptó al castellano los versos y estrofas de las poesías italianas.

Segundo Renacimiento (Época de Felipe II)

Durante la segunda mitad del siglo XVI, la influencia es contrarreformista y se desarrolla la literatura religiosa. Es un periodo marcado por la crisis y el pesimismo. España se sitúa al frente de la Contrarreforma, cierra sus fronteras y prohíbe libros. Surge una nueva actitud frente a los hechos religiosos. Los poetas más destacados de este periodo fueron Fray Luis de León y San Juan de la Cruz.

San Juan de la Cruz

San Juan de la Cruz concebía la poesía como un medio para comunicarse con Dios. Por lo tanto, sus versos son la expresión de la doctrina mística y de su experiencia personal en ese campo. Sus dos grandes poemas son: Noche oscura del alma y Cántico espiritual. Al margen de su significado religioso, estos poemas pueden ser considerados como ejemplos inigualables de poesía amorosa.

El Pensamiento Renacentista

No es fácil sintetizar las peculiaridades de un periodo histórico como el renacentista, en el que conviven corrientes muy diversas y, a veces, contradictorias. Sin embargo, lo que sí está claro es que el pensamiento propio del Renacimiento se configura a partir del humanismo y de la cultura clásica como modelo.

Literatura Ascética y Mística

A principios de siglo, aparece tardíamente en España una literatura ascética y mística.

  • Ascética: Se ocupa de los esfuerzos que el espíritu debe realizar para alcanzar la perfección moral.
  • Mística: Trata de los fenómenos difícilmente describibles que experimentan algunos al entrar en contacto directo con Dios a través de la oración.

La ascética es una parte de la mística, ya que todo místico debe ser asceta, pero no todos los ascetas logran vivir experiencias místicas, ya que estas son un regalo de Dios a almas excepcionales.

Las Tres Vías Místicas

  • Purgativa: Proceso duro y áspero por el cual el alma se purifica.
  • Iluminativa: Tras la purificación, viene una luz o saber sobrenatural acerca de Dios.
  • Unitiva: El alma, arrebatada por Dios, se une totalmente con Él, anulando todos los sentidos.

Escritores Místicos

Los mejores escritores místicos fueron Santa Teresa de Jesús y San Juan de la Cruz.

Santa Teresa de Jesús

Santa Teresa de Jesús se caracteriza por su sencillez y sinceridad, que fueron norma de esta extraordinaria mujer, y también características de su estilo. Su prosa es, en gran medida, castellano coloquial.

Muero porque no muero.
Vivo sin vivir en mí, y tan alta vida espero,
Que muero porque no muero.
Santa Teresa de Jesús

Fray Luis de León

Oda a la vida retirada:
¡Qué descansada vida
la del que huye el mundanal ruido,
y sigue la escondida
senda, por donde han ido
los pocos sabios que en el mundo han sido!
Fray Luis de León

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