11 Mar
1.6. Las Nuevas Fuentes de Energía Renovables
Las energías renovables proceden de recursos inagotables, son limpias y muestran una elevada dispersión, lo que permite utilizarlas en lugares diversos.
Su uso comenzó tras la crisis del petróleo, que exigió reducir la dependencia energética y aumentar el autoabastecimiento. No obstante, su implantación ha sido lenta debido a su mayor precio y a una tecnología escasa. En la actualidad, este problema está superado en las centrales eólicas, mini hidráulicas y sobre térmicas. Este hecho, unido a la necesidad de reducir la contaminación, ha dado lugar a un plan para fomentarlas: el PLAN DE ENERGÍAS RENOVABLES (PER).
La producción de energía a partir de fuentes renovables ofrece en España condiciones favorables, debido a la diversidad de su medio natural.
Su destino principal es producir energía eléctrica, térmica o mecánica.
- Minicentrales hidráulicas: Son centrales de poca potencia que utilizan saltos de ríos para producir electricidad.
- Energía de biomasa: Se obtiene de residuos biológicos agrícolas, ganaderos y forestales, así como de las industrias agroalimentarias y de la madera. Estos residuos, al quemarse, proporcionan energía térmica o eléctrica y, al fermentar, biogás. En España predomina la producción térmica, aunque se está fomentando la co-combustión o combustión conjunta de la biomasa con el carbón en las centrales existentes. Además, se está desarrollando la llamada “biomasa verde” o cultivos energéticos destinados a producir biocarburantes para el transporte.
- Energía eólica: Utiliza la fuerza del viento para producir energía mecánica o eléctrica. Su crecimiento ha sido espectacular gracias a la reducción de los costes. Los parques eólicos se sitúan en zonas con vientos intensos, constantes y regulares. Por eso se centran en el litoral gallego, Tarifa y Navarra.
- Energía solar: Usa el calor y la luz del sol. Las centrales solares térmicas utilizan placas para calentar el agua y las calefacciones domésticas. Las centrales termoeléctricas utilizan espejos para producir vapor, paneles de silicio para convertir la luz solar en electricidad en grandes centrales o en pequeñas instalaciones rurales.
- Energía geotérmica: Usa el vapor o el agua caliente subterránea. En España es muy escasa.
- Energía mareomotriz: Utiliza la fuerza del agua del mar. En España se están construyendo centrales experimentales para aprovechar la fuerza de las olas.
4.3. La Estructura Actual de la Industria
La industria española tiene problemas estructurales que le restan competitividad y dificultan las exportaciones.
- Dimensión de las empresas e industrias: Es inadecuada. La mayoría (más del 99%) son pymes, lo que tiene la ventaja de ser más flexibles ante los cambios de la industria, pero su producción es más cara, menos competitiva y con menos inversión en investigación.
- Investigación e innovación: Son insuficientes:
- La inversión en I+D es menor que en los países europeos avanzados. Está concentrada en los sectores más dinámicos (ejemplo: sector químico), en las grandes empresas y en algunas zonas como Madrid y Barcelona.
- En los últimos años ha mejorado la innovación en las pequeñas empresas.
- Tecnología: Es insuficiente y dependiente: España invierte poco en investigación, por lo que crea poca tecnología y tiene que comprar patentes, lo que disminuye la competitividad y lleva a un déficit en la balanza de pagos tecnológicos.
La balanza tecnológica es deficitaria: las principales empresas de automóviles, maquinaria eléctrica y productos farmacéuticos fabrican con patentes extranjeras.
Productividad industrial: Es inferior a la de la UE, hecho que incrementa el coste laboral.
Es fundamental dedicar un porcentaje más elevado del PIB al I+D.
5.3. Las Tendencias Actuales: Difusión y Concentración
La industria presenta dos tendencias principales:
- Difusión de parte de la industria hacia espacios periféricos:
Los problemas que presentan las grandes concentraciones industriales son la saturación, el encarecimiento del suelo, la conflictividad laboral y el deterioro del medio ambiente.
Las mejoras tecnológicas y en el transporte permiten llevar la industria a los lugares con más ventajas.
El desarrollo de la industrialización endógena se basa en las ventajas de cada territorio. Los sectores más afectados por la deslocalización son los sectores maduros. Estos tienden a desplazarse a los espacios periféricos donde pueden reducir los costes: países subdesarrollados, regiones más atrasadas, periferias urbanas y áreas rurales bien comunicadas.
- Concentración industrial en los espacios centrales: Se mantiene. En ellos tienden a instalarse los sectores de nuevas tecnologías, que exigen servicios e infraestructuras avanzadas y un mercado de mayor nivel. También buscan espacios centrales las sedes sociales y de gestión.
Estas actividades suelen concentrarse en los espacios centrales, de países más avanzados, las regiones más dinámicas y en los núcleos centrales de las áreas metropolitanas.
Así, la situación actual es compleja y contradictoria. Por una parte, atracción de los centros industriales, y por otra parte, difusión hacia las periferias.
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