08 Oct

El Fenómeno de La Niña

El fenómeno de La Niña se produce de forma contraria al fenómeno de El Niño, con aumento de la intensidad de los vientos alisios, que desplazan con fuerza las masas de agua cálida hacia Australia. En este caso, el aumento de temperatura del aire es más considerable y, al ascender y condensarse, crea precipitaciones importantes, generando inundaciones. En las costas de Sudamérica, el fenómeno de afloramiento es tan intenso que la situación anticiclónica estable deriva en problemas de sequía, pues se mantiene en el tiempo con ausencia de precipitaciones. El nivel del mar disminuye en las costas de Sudamérica y aumenta en Oceanía y Asia, donde las precipitaciones e inundaciones son comunes.

Medidas Preventivas ante Inundaciones

Medidas Preventivas Estructurales:

  • Embalses de laminación
  • Cauces de emergencia
  • Reforestación
  • Obra de drenaje

Medidas Preventivas No Estructurales:

  • Restricciones de usos del suelo
  • Ordenación territorial de zonas inundables
  • Establecer seguros de riesgos

Medidas Predictivas:

  • Uso de radares meteorológicos
  • Análisis estadísticos de zonas de riesgo

Plan de Acción en Caso de Inundación

  1. Mantener objetos de valor, documentación o productos peligrosos en lugares elevados.
  2. Escuchar las noticias en la radio o verlas en la televisión.
  3. Subir a pisos superiores si los hay.
  4. Alejarse de los cables eléctricos.
  5. No desplazarse en coche.
  6. No salir a la calle hasta que las autoridades lo indiquen.

Conceptos

1. Vendavales

Vientos que circulan por encima de los 75 km/h.

2. Gota Fría (DANA)

Fenómeno originado por la rotura del chorro polar, debido a la variación de la intensidad de radiación solar en la superficie terrestre a lo largo del año. Se le denomina también Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA). Se forma una masa de aire frío en altura y, cuando se rodea de masas de aire más caliente, y a consecuencia del descenso en latitud, se moviliza súbitamente hacia la superficie terrestre. Si este aire cálido que asciende al ser desplazado va cargado de humedad, dará lugar a precipitaciones. En poco tiempo se pueden producir precipitaciones y grandes destrozos, aunque esto no ocurre necesariamente.

Puede originarse en cualquier época del año, pero es más común a finales de invierno, primavera y otoño, en los que hay mayor dinámica atmosférica. Sucede con frecuencia en el Mediterráneo, pero puede afectar a otras zonas geográficas, incluso a Canarias.

3. Tornados

Los tornados son embudos verticales de aire que giran muy deprisa. Sus vientos pueden alcanzar hasta 500 kilómetros por hora. En ellos se crea un gradiente de presión con efecto de succión en su zona central. Provienen de unas nubes denominadas cumulonimbos y los ingredientes para que sucedan son: la formación de una nube de tormenta. Para eso se necesita que aire cálido y húmedo sea forzado a elevarse por un mecanismo de ascenso, como por ejemplo, la presencia de un frente frío. Otros factores a tener en cuenta son la gran inestabilidad del aire y una fuerte cortante vertical del viento (diferencia de velocidad del viento de un punto a otro de la atmósfera). Son típicos en Norteamérica, pero también pueden suceder en España, en las costas del sur y del este peninsular.

4. Ciclones, Tifones y Huracanes

Suelen ocurrir en verano y otoño, en zonas próximas al ecuador. Causadas por grandes masas de aire que ascienden a la estratosfera causando inundaciones y atrayendo masas de aire circundantes, formando enormes torbellinos. Con un diámetro de unos 500 km, y girando en torno a una parte central (el ojo del huracán), se trata de uno de los fenómenos más devastadores de la naturaleza. En función de la localización geográfica donde suceden se les denomina ciclones, huracanes o tifones, pero estos términos son sinónimos.

5. Avenidas o Crecidas

Son inundaciones temporales de terrenos normalmente secos, debido al aporte en cantidad de agua muy superior a la habitual. Pueden deberse a causas naturales o a la acción humana. Pueden ser fluviales, si se producen como consecuencia de la dinámica normal de un río, de forma continuada y sin excesiva pendiente. También pueden ser torrenciales, que son las originadas en los torrentes, cursos de agua, estacionales, cortos y generalmente de gran pendiente. Solo llevan agua esporádicamente, tras las lluvias torrenciales o en las épocas de deshielo.

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