06 Mar
El Imperio Carolingio y el Surgimiento del Feudalismo
Carlomagno, rey de los francos, unificó gran parte de Europa occidental y fue proclamado emperador en el año 800. Para administrar su vasto territorio, lo dividió en condados (gobernados por condes) y creó las marcas (gobernadas por marqueses) para defender sus fronteras.
Tras la muerte de Carlomagno, sus sucesores dividieron el Imperio en varios reinos mediante el Tratado de Verdún (843). Este hecho, sumado a las invasiones de los siglos IX y X (normandos por el norte, musulmanes por el sur y húngaros por el este), generó una gran inestabilidad en Europa.
El Feudalismo y la Sociedad Estamental
El poder de los reyes europeos se debilitó, y para gobernar y proteger a la población, establecieron un sistema de relaciones personales con los nobles conocido como vasallaje. Este sistema dio origen al feudalismo:
- El vasallo juraba fidelidad al rey a cambio de tierras (feudos).
- La ceremonia se dividía en dos partes:
- Homenaje: el vasallo juraba fidelidad.
- Investidura: el rey otorgaba el feudo.
Los nobles, obispos y abades se convirtieron en señores feudales, con autoridad sobre sus tierras y campesinos. El feudalismo configuró la sociedad estamental, dividida en grupos cerrados a los que se pertenecía por nacimiento:
- Privilegiados: nobleza (dedicada a la guerra) y clero (dedicado a la oración).
- No privilegiados: campesinos y artesanos (dedicados al trabajo).
El Clero y las Cruzadas
El clero, constituido por las personas dedicadas al servicio de la Iglesia, se dividía en dos categorías:
- Clero secular: curas, párrocos y obispos, encargados de las parroquias.
- Clero regular: monjes y abades, que vivían en monasterios.
Los lugares donde había vivido Cristo, especialmente Jerusalén (Tierra Santa), se convirtieron en centros de peregrinación. En el siglo XI, los turcos conquistaron Jerusalén y prohibieron la entrada a los cristianos. El Papa Urbano II convocó a los cristianos a reconquistar Tierra Santa, dando inicio a las Cruzadas, una serie de guerras religiosas.
El Arte Gótico
El Gótico, originado en Francia en el siglo XIII, se extendió por Europa occidental. Fue un estilo urbano, impulsado por el crecimiento de las ciudades, la burguesía y la Iglesia. Las ciudades demandaban nuevos edificios civiles y catedrales, símbolos del poder económico y la religiosidad.
Las nuevas técnicas constructivas, como el arco ojival y la bóveda de crucería, permitieron construir edificios más altos y luminosos. Estos elementos descargaban el peso sobre columnas, arbotantes y contrafuertes exteriores, permitiendo abrir grandes ventanales. La decoración incluía pináculos, flechas, portadas con esculturas, vidrieras y rosetones.
La Economía en las Coronas de Castilla y Aragón
Corona de Castilla
La economía castellana se basaba principalmente en la agricultura (especialmente el cereal), pero la ganadería ovina (ovejas merinas) era fundamental. La nobleza, propietaria de los rebaños, fundó el Honrado Concejo de la Mesta (1237) para regular la trashumancia.
La mayor parte de la lana se exportaba a las ciudades textiles de Flandes. El centro de este comercio era Burgos, desde donde la lana se enviaba a Flandes por los puertos del Cantábrico. Esto impulsó la actividad comercial en la Meseta, con importantes mercados y ferias, como la de Medina del Campo.
Corona de Aragón
Aunque la economía aragonesa también se basaba en la agricultura y la ganadería, su auge se debió a las manufacturas y al comercio marítimo. Entre los siglos XIII y XV, se desarrollaron rutas comerciales por el Mediterráneo y hacia Flandes. En los principales puertos se crearon los Consulados de Mar, donde los cónsules resolvían litigios comerciales.
La Corona de Aragón protegió estas rutas mediante la conquista de enclaves estratégicos:
- Sicilia (1282)
- Cerdeña (1323)
- Ducados de Atenas y Neopatria (siglo XIV, ocupados por los almogávares)
- Nápoles (siglo XV, conquistado por Alfonso el Magnánimo)
El Humanismo
El Humanismo fue un movimiento de renovación cultural surgido en Italia en el siglo XV. Sus principales características eran:
- Exaltación del ser humano, considerado el único ser dotado de razón y libertad.
- Rechazo de la mentalidad medieval centrada en Dios.
- Inspiración en la cultura grecolatina.
- Aunaba la cultura clásica y el interés científico con los valores cristianos (Erasmo de Rotterdam).
Las ideas humanistas se difundieron gracias a:
- La invención de la imprenta por Gutenberg (1455), que facilitó la impresión de libros y amplió el número de lectores.
- Las Academias, centros de eruditos protegidos por mecenas.
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