29 Dic


TEORÍAS DE PLATÓN


– Teoría de las “ideas”: La teoría de las “ideas” de Platón es, al mismo, tiempo una teoría de la realidad (dividida en dos mundos, el mundo sensible y el mundo inteligible o de las Ideas) y una teoría del conocimiento (dividido en dos grados: doxa u opinión- conocimiento imperfecto- y episteme o ciencia –conocimiento perfecto-). Según Platón, el conocimiento verdadero es el que trata sobre las “Ideas” que son  la esencia de las cosas sensibles, es decir, el conjunto de propiedades de un objeto que hace que sea lo que es y no otra cosa.
No son sólo un concepto o una representación mental, sino una realidad en sí.
Existen en un mundo aparte (mundo inteligible), que está separado del mundo sensible.
Son los modelos perfectos de las cosas sensibles, a los cuales se parecen las cosas. Son únicas, perfectas, inmutables y universales y se conocen por la razón y la “intuición intelectual”.
Y se encuentran ordenadas y jerarquizadas:
La idea de Bien es la que se encuentra en la cumbre y de la que dependen todas las demás. 
– Teoría de la REALIDAD (ontología): El mito de la caverna le sirve a Platón para explicar su teoría de la realidad, según la cual, la verdadera realidad no reside en los seres físico-sensibles que captamos por medio de los sentidos; sino que la verdadera realidad son las Ideas (entidades inteligibles, universales, eternas e inmutables) que sólo pueden conocerse por medio del entendimiento. Estas Ideas pertenecen a un mundo totalmente opuesto al de los sentidos. Así, Platón distingue distintos grados o niveles de realidad: El mundo sensible (representado en el mito como el interior de la caverna) y el mundo inteligible (representado en el mito como el exterior de la caverna), que sería el mundo auténticamente real. 

Teoría del CONOCIMIENTO (gnoseología):

según Platón sólo hay conocimiento verdadero de la auténtica realidad, aquélla que no cambia y que reúne todas las perfecciones, es decir, del mundo de las Ideas (exterior de la caverna). De este modo, la percepción sensible, a través de la cual captamos los objetos físicos (que sería en el mito lo que ven los hombres atados del interior de la caverna), no constituye el conocimiento verdadero.
El conocimiento verdadero versa sobre las Ideas y es un conocimiento universal. Así, Platón distingue distintos grados de conocimiento: la doxa u opinión, que es un tipo de conocimiento que tiene su origen en los sentidos y por objeto de conocimiento el mundo sensible y material, por lo que no aporta ciencia o conocimiento verdadero, ya que los sentidos nos ofrecen un mundo en constante cambio y movimiento; y la episteme (o ciencia), que es el conocimiento verdadero y debe versar sobre la realidad inmutable, eterna y perfecta, esto es, sobre las Ideas.  En la opinión encontramos 2 niveles de conocimiento
:

la imaginación (que tiene por objeto de conocimiento las sombras o imágenes de los seres sensibles y consiste en la interpretación de dichas imágenes, en simples conjeturas)
y la creencia (que toma por objeto de conocimiento los objetos sensibles y materiales de los cuales son sombras los precedentes: animales, plantas,… El tipo de disciplina que se da en este nivel de conocimiento es la Física.)
Y en la Episteme también habría 2 niveles de conocimiento
:
La razón discursiva o dianoia (que tiene por objeto de conocimiento las entidades matemáticas que constituyen el paso del mundo sensible al inteligible) y la inteligencia (noésis) o razón pura (que es el grado o nivel superior de conocimiento. El tipo de realidad que le corresponde es la más perfecta: las Ideas. La ciencia que aquí encontramos es la dialéctica). 

– Teoría política:

El objetivo político de Platón es construir una polis donde reine la justicia y con ella la felicidad de los ciudadanos.
Para ello, Platón divide el Estado en 3 clases sociales, de acuerdo con los 3 tipos de actividades que son necesarias para su subsistencia:
Los productores o artesanos (que será la clase económicamente productiva)
, los auxiliares o guerreros (que se encargaran del mantenimiento de la convivencia social, de la ampliación del territorio y, en general, de la defensa de éste y de la justicia)
y los gobernantes o guardianes perfectos (que se encargarán del gobierno).
Además, Platón establece que justicia en la ciudad consiste en el cumplimiento adecuado del principio de especialización (que cada individuo y clase social cumplan con la función que le corresponde)
, es decir: que el gobernante gobierne con prudencia, que el guerrero defienda la ciudad con valentía y que los productores desarrollen la actividad económica ordenadamente, con armonía (moderación). Por último, es preciso señalar que para Platón los gobernantes han de ser los sabios-filósofos que, como conocedores de las Ideas inmutables y perfectas, son los más capaces de conservar las leyes y las instituciones de la ciudad porque están acostumbrados al conocimiento de lo perfecto e inmutable. Además, en Platón, los gobernantes no serán conducidos por la ambición personal y el derecho del más fuerte, sino que se inspirarán en la contemplación del orden eterno e inmutable de las Ideas.

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