28 Oct

1.3 Hispania Romana

Conquista y Romanización

En el año 219 a.C., el general cartaginés Aníbal Barca atacó Sagunto, aliada de Roma. Este hecho provocó la Segunda Guerra Púnica (218-201 a.C.) e inició la conquista romana de la península ibérica. Tras la victoria de Publio Cornelio Escipión en Zama, comenzó la segunda fase, dirigida contra lusitanos y celtíberos. La última fase culminó en el 19 a.C., convirtiendo a Hispania en provincia romana.

El proceso de romanización fue desigual. Roma impuso su lengua (latín) y cultura. Augusto reorganizó Hispania en tres provincias: Tarraconense e Hispania Ulterior (dividida después en Lusitania y Baetica), y Hispania Citerior (dividida después en Cartaginense y Gallaecia). La administración se basaba en ciudades. La economía se centraba en la agricultura, el comercio y la artesanía. Socialmente, había ciudadanos (nobles, caballeros) y no ciudadanos (libertos, esclavos). La ingeniería romana destacó, ejemplificada por el acueducto de Segovia y el teatro de Mérida.

1.4 Monarquía Visigoda

El Reino Visigodo en Hispania

En 415, los visigodos se aliaron con Roma, estableciéndose en la Galia a cambio de ayuda militar. Tras la derrota en Vouillé (507), se trasladaron a Hispania, fundando un reino con capital en Toledo. Leovigildo impulsó la unidad territorial conquistando el reino suevo. La unificación culminó en el siglo VII con la expulsión de bizantinos. El Tercer Concilio de Toledo (589), promovido por Recaredo, impuso el catolicismo. Recesvinto logró la unidad jurídica con un código de leyes.

Instituciones Visigodas

  • Monarquía: Autoritaria, primero electiva, luego hereditaria
  • Aula Regia: Órgano consultivo de nobles y obispos
  • Officium Palatinum: Núcleo administrativo
  • Concilios Eclesiásticos: Inicialmente religiosos, luego con poder político

Los visigodos mantuvieron la división provincial romana, con gobernadores (duques) y condes en territorios menores. La vida era predominantemente rural.

1.5 Reyes Católicos: Unión Dinástica y Guerra de Granada

Unión Dinástica y Bases del Estado Moderno

El Tratado de Alcaçovas (1479) reconoció a Isabel I como reina de Castilla, y Fernando II como rey de Aragón, creando la monarquía hispánica. Fue una unión dinástica con objetivos comunes (dominio peninsular, unidad religiosa, fortalecimiento real), pero sin unidad territorial ni institucional. Los Reyes Católicos sentaron las bases del Estado Moderno, sobre todo en Castilla, reforzando su autoridad sobre la nobleza, la Iglesia y los municipios. Mejoraron la recaudación fiscal, fortalecieron el ejército, desarrollaron la diplomacia y reorganizaron la justicia. El Consejo Real se convirtió en el principal órgano de gobierno.

La Conquista de Granada

En 1482, los Reyes Católicos aprovecharon las disputas internas de Granada, iniciando una guerra de 10 años que finalizó con la rendición de Granada el 2 de enero de 1492. Consiguieron el dominio territorial y la unidad religiosa con la expulsión de judíos y la conversión forzosa de musulmanes (moriscos).

2. Exploración y Colonización de América

El Descubrimiento y la Conquista

Tras la caída de Constantinopla (1453), Portugal y Castilla buscaron rutas alternativas a las Indias. Los Reyes Católicos apoyaron el proyecto de Colón, firmando las Capitulaciones de Santa Fe (1492). Colón llegó a las Antillas el 12 de octubre de 1492. El Tratado de Tordesillas (1494) reguló la competencia con Portugal. Siguieron expediciones y conquistas a través de capitulaciones. Magallanes y Elcano dieron la primera vuelta al mundo, Cortés conquistó México y Pizarro, Perú.

Explotación Colonial

América proporcionó recursos (oro, plata). El sistema de encomiendas y la mita explotaron la mano de obra indígena. Fray Bartolomé de las Casas denunció los abusos. La Casa de Contratación de Sevilla y el Consejo de Indias administraron los asuntos americanos.

3. Los Austrias (Siglo XVI): Política Interior y Exterior

Carlos I y el Imperio

Carlos I (1516-1556) heredó las coronas de Castilla y Aragón, Austria, Borgoña y el Imperio (Carlos V). En España, enfrentó las revueltas de las Comunidades y las Germanías. En Europa, fracasó en mantener la unidad religiosa, firmando la Paz de Augsburgo (1555). Luchó por la hegemonía contra Francia y el Imperio Otomano.

Felipe II y la Expansión

Felipe II (1556-1598) heredó todos los territorios excepto las posesiones austriacas y el título imperial. Enfrentó la rebelión de las Alpujarras y el problema de Antonio Pérez. Firmó la Paz de Cateau-Cambrésis (1559) con Francia y venció en Lepanto (1571). Fracasó en los Países Bajos e Inglaterra.

4. Los Austrias (Siglo XVII): Decadencia y Crisis

Declive Español

El siglo XVII marcó la decadencia española por el agotamiento económico y la pérdida de hegemonía. Felipe III (1598-1621) gobernó un reino en quiebra, optando por la pacificación. La expulsión de los moriscos (1609) tuvo graves consecuencias económicas.

Felipe IV y la Guerra

Felipe IV (1621-1665), con el valido Olivares, reinició la guerra contra las Provincias Unidas e intervino en la Guerra de los Treinta Años (1618-1648), lo que llevó a la guerra con Francia y rebeliones internas (1640). La Paz de Westfalia (1648) puso fin al dominio Habsburgo en Europa. La guerra con Francia continuó hasta la Paz de los Pirineos (1659).

Carlos II y la Sucesión

Carlos II (1665-1700) enfrentó la expansión de Luis XIV y la pérdida de territorios. En 1668 se reconoció la independencia de Portugal. Su falta de descendencia provocó la Guerra de Sucesión.

5. Sociedad, Economía y Cultura (Siglos XVI y XVII)

Siglo XVI: Crecimiento y Precios

El siglo XVI experimentó crecimiento demográfico debido al auge artesanal y el comercio internacional. La demanda de productos americanos y el crecimiento demográfico causaron problemas de abastecimiento y una subida de precios que afectó a los más desfavorecidos.

Siglo XVII: Crisis Generalizada

El siglo XVII fue de crisis económica generalizada. Disminuyó la actividad agraria y ganadera, se frenaron las exportaciones, y el comercio con América se vio afectado por el contrabando. La expulsión de los moriscos agravó el descenso de población. El crecimiento de grupos improductivos empeoró la situación.

El Siglo de Oro

Culturalmente, el siglo XVI estuvo marcado por el Humanismo y el Renacimiento, y el siglo XVII por el Barroco. Este periodo, conocido como el Siglo de Oro, floreció en pensamiento, letras y artes (Nebrija, Cervantes, El Greco, Calderón de la Barca, Velázquez, Gregorio Fernández…).

6. Guerra de Sucesión y Paz de Utrecht

La Crisis de la Sucesión

La muerte de Carlos II (1700) sin descendencia provocó una crisis internacional. Felipe de Anjou (nieto de Luis XIV) y el archiduque Carlos de Austria compitieron por el trono. La Gran Alianza combatió a Francia, iniciando la Guerra de Sucesión Española (guerra europea y civil).

La Paz de Utrecht

La Paz de Utrecht (1713) finalizó la guerra. Inglaterra obtuvo beneficios comerciales y territoriales. Austria recibió Países Bajos, el Milanesado, Nápoles y Cerdeña. Saboya anexionó Sicilia.

Pactos de Familia

Tras el reinado de Felipe V, España se acercó a Francia mediante los Pactos de Familia (1733, 1743, 1761), obteniendo territorios a cambio de apoyo militar. El Tercer Pacto involucró a España en la Guerra de los Siete Años, perdiendo Florida y ganando Luisiana.

7. Reformas Borbónicas en América

El Reformismo Borbónico

El siglo XVIII fue de prosperidad para el Imperio español. El reformismo borbónico, especialmente con Carlos III, buscó un mayor control político y económico sobre América, perdido en el siglo XVII. Las reformas buscaban conservar la integridad territorial y convertir a América en fuente de recursos para España.

Medidas Reformistas

Se crearon dos nuevos virreinatos (Nueva Granada y Río de la Plata), intendencias y nuevas audiencias. Se fomentó el desarrollo naval, se construyeron fortificaciones y arsenales, y se crearon batallones fijos y expedicionarios.

Deja un comentario