En el surgimiento de la Modernidad, durante el Siglo XVI, confluyen tres factores:

El Humanismo renacentista: este movimiento cultural supuso una vuelta a Los autores clásicos, griegos y romanos, por el deseo de encontrar un Modelo cultural distinto del medieval. Frente al teocentrismo de la Edad Media, esta época se caracteriza por el antropocentrismo: el ser humano Es el núcleo de toda reflexión teórica, pero es un ser humano natural Alejado de su dimensión sobrenatural o religiosa. Realismo político de Maquiavelo. Punto de partida: la realidad del ser humano

La Reforma protestante de Lutero: intentó recuperar el espíritu originario Del cristianismo y llevó a la división de la Iglesia. 

La Revolución Científica: iniciada en el Siglo XVI y que culminó con la Física de Newton, creó una nueva imagen del universo e impulsó la Reflexión sobre el conocimiento. En este sentido la aportación de Francis Bacón fue importante, ya que rechazó el criterio de autoridad de La Iglesia y defendíó la observación/experiencia directa de la Naturaleza como fuente de conocimiento científico. 

Las Dos grandes corrientes que se enfrentarán a lo largo del Siglo XVII Serán el Racionalismo y el Empirismo. Aunque  las posturas serán Opuestas, ambos movimientos filosóficos compartieron la misma Preocupación: el conocimiento, su origen y sus límites. De ahí que la Teoría del conocimiento sea la disciplina filosófica más trabajada por Los pensadores.

El Racionalismo tiene su principal representante en el francés René Descartes, que es considerado el padre de esta corriente filosófica. Las Ideas que lo caracterizan son:

Confianza Absoluta en la razón. Los principios fundamentales y evidentes no Proceden de la experiencia sensible, sino que la razón en sí posee esos Principios. Es decir, el ser humano tiene ideas innatas, Que son connaturales a dicha razón. Por eso las matemáticas son el Modelo de ciencia, porque se basan en principios que no tienen que ver Con la experiencia sensible.

El Método, para llegar a verdades absolutamente ciertas (conocimientos “claros y distintos”). Descartes propone un conjunto de reglas que Configuran su método. Son cuatro: evidencia, análisis, síntesis y Enumeración.

Duda metódica: Aplicando su método, Descartes pone en tela de juicio todos los Conocimientos que ha aprendido a lo largo de su vida, dudando de todo: Primero, de los sentidos y el sueño; después, de los conocimientos Matemáticos.

Primera Certeza: cogito ergo sum. La única verdad de la que no es posible dudar Es que yo soy un sujeto que piensa, siente, afirma, niega, se equivoca. Luego la afirmación: “Pienso, luego existo” es la base de la filosofía Cartesiana. Es una verdad de razón, independiente de la experiencia.

El Empirismo es una corriente filosófica británica, cuyo principal representante es David Hume. Sus rasgos son:

Confianza Absoluta en la experiencia y rechazo de las ideas innatas. Con Anterioridad a la experiencia sensible, nuestro entendimiento es como Una página en blanco en la que no hay nada escrito. Todo nuestro Conocimiento procede de la experiencia. Por eso, la física es Considerada el modelo de ciencia, porque se basa en fenómenos que Ocurren en la naturaleza.

Pero Ambas posturas acaban planteando problemas filosóficos. Por un lado el Racionalismo construye verdades independientes de la experiencia que Tienen que ser aceptadas ciegamente; por otro, el Empirismo acaba Concluyendo que no hay ninguna verdad segura y universal porque todo Depende de la experiencia del sujeto concreto que conoce.

Inmanuel Kant será el que armonice ambas posturas. En su Crítica de la razón Pura analiza en profundidad el tema del conocimiento, integrando los dos Niveles de conocimiento (sensibilidad y entendimiento) en un mismo Proceso.

 

ILUSTRACIÓN – Siglo XVIII

La Ilustración fue un amplio movimiento cultural y filosófico que Considera a la RAZÓN la facultad esencial del conocimiento y fuente del Progreso de la humanidad. La razón ilustrada puede liberar al hombre de La ignorancia, de las supersticiones religiosas y de la opresión Política. 

En este sentido, I. Kant, uno de los principales pensadores ilustrados dice: «Sapere Aude: ten el valor de servirte de tu propio entendimiento. He aquí el Lema de la Ilustración». La definición kantiana está muy relacionada con Los rasgos propios de la razón ilustrada: a) actitud crítica b) Tolerancia c) secularización (separación total de la fe).

Por Otro lado, la Ilustración mantuvo su confianza en el progreso de la Razón y de la humanidad, un progreso continuo y sin límites. Esta Confianza se basa en la creencia en que el hombre se va perfeccionando a Lo largo de la historia y en el convencimiento de la capacidad Liberadora de la razón.

Sin Embargo, J. J. Rousseau, aunque también se enmarca dentro del ámbito de La Ilustración, fue muy crítico con el optimismo ilustrado, que Mostraba una total confianza en la razón y en el progreso. Según él, el Hombre es bueno por naturaleza, y son la cultura y la sociedad  los Medios principales de la degeneración del ser humano.