08 Nov
1. La Gran Depresión: Colapso Económico Mundial
1.1. La Crisis de 1929 en Estados Unidos
A fines de la década de 1920, Estados Unidos experimentaba un período de aparente prosperidad. Sin embargo, esta situación ocultaba problemas subyacentes como el estancamiento de los salarios y el consumo. La quiebra de la Bolsa de Valores de Nueva York el 24 de octubre de 1929 marcó el inicio de una profunda crisis económica que se extendería a nivel mundial. Millones de personas perdieron sus ahorros y empleos, dando fin a la prosperidad de los años 20 e iniciando la llamada Gran Depresión.
La caída de la bolsa provocó un efecto dominó: la quiebra de bancos, el cierre de empresas y la disminución del comercio internacional. Los países europeos, especialmente aquellos que dependían del comercio con Estados Unidos, sufrieron un fuerte impacto. El patrón oro, un sistema monetario que regulaba los intercambios internacionales, fue abandonado por muchos países en un intento por proteger sus economías. Entre 1929 y 1932, la producción mundial cayó casi un 40%, y el volumen del comercio internacional se redujo drásticamente.
1.2. El New Deal de Roosevelt
En 1932, Franklin D. Roosevelt fue elegido presidente de Estados Unidos con la promesa de un Nuevo Pacto o New Deal. Roosevelt creía que el gobierno debía intervenir activamente para reactivar la economía y paliar los efectos sociales de la crisis. El New Deal implementó una serie de medidas que incluían la creación de empleos públicos, la regulación del sistema financiero y la asistencia a los sectores más afectados, como los agricultores.
En Europa, los gobiernos también intentaron salir de la crisis mediante el aumento del gasto público, con la esperanza de estimular la economía. Sin embargo, estas medidas no lograron el efecto deseado y la crisis se agravó.
2. El Ascenso de los Totalitarismos
2.1. La Unión Soviética bajo Stalin
Tras la muerte de Lenin en 1924, se desató una lucha por el poder en la Unión Soviética entre León Trotsky y Joseph Stalin. Stalin se impuso como líder del Partido Comunista en 1928 e inició un proceso de transformación radical del país.
Stalin implementó la industrialización planificada y la colectivización forzosa de la agricultura. La economía soviética pasó a estar controlada por el Estado a través de planes quinquenales que establecían metas de producción y consumo. Stalin también consolidó su poder absoluto mediante la eliminación de cualquier oposición política. Las purgas, iniciadas en 1936, fueron campañas de persecución y eliminación de opositores reales o imaginarios, incluyendo antiguos dirigentes del partido.
A pesar del costo humano, la planificación centralizada de Stalin logró un notable crecimiento económico de la URSS, lo que generó cierta admiración por el modelo socialista en algunos sectores.
2.2. El Auge de los Regímenes Autoritarios en Europa
La crisis económica de la década de 1930 generó un clima de inestabilidad política en Europa. La democracia liberal fue percibida por muchos como ineficaz para resolver los problemas económicos y sociales. En este contexto, surgieron líderes autoritarios que prometían soluciones rápidas y un retorno al orden.
En Italia, Benito Mussolini consolidó su poder y estableció un régimen fascista. En Alemania, el Partido Nazi liderado por Adolf Hitler ascendió al poder aprovechando la crisis y el descontento popular. Regímenes autoritarios también se establecieron en otros países como Polonia, Yugoslavia, Austria, Portugal y Hungría.
2.3. El Nazismo en Alemania
2.3.1. El Ascenso del Partido Nazi
En la década de 1920, Alemania se constituyó como una república democrática. Sin embargo, la inestabilidad política, los problemas económicos y las pesadas reparaciones de guerra impuestas tras la Primera Guerra Mundial crearon un clima de descontento. En este contexto, surgió el Partido Nacionalsocialista Obrero Alemán (NSDAP), liderado por Adolf Hitler.
2.3.2. La Ideología Nazi
El nazismo combinaba un discurso anticapitalista con un nacionalismo extremo. Hitler culpaba a Francia, Gran Bretaña y a los políticos alemanes que firmaron el Tratado de Versalles por la situación de Alemania tras la guerra. El nazismo también promovía ideas racistas y antisemitas, considerando a la raza aria como superior y a los judíos como enemigos.
2.3.3. La Toma del Poder por Hitler
La crisis económica mundial de 1929 agravó la situación en Alemania y favoreció la difusión de las ideas nazis. En 1933, Hitler fue nombrado canciller y convocó a elecciones anticipadas. La campaña electoral se caracterizó por la violencia política de las organizaciones paramilitares nazis. Tras obtener la victoria electoral, el parlamento otorgó poderes absolutos a Hitler, quien disolvió los partidos políticos opositores e instauró un régimen totalitario de partido único.
3. Conclusión
La década de 1930 fue un período de crisis económica y política a nivel mundial. La Gran Depresión, iniciada en Estados Unidos, se extendió a todo el mundo, generando desempleo, pobreza e inestabilidad social. En este contexto, surgieron regímenes totalitarios que prometían soluciones rápidas y un retorno al orden. La Unión Soviética bajo Stalin, la Italia fascista y la Alemania nazi fueron ejemplos de este tipo de regímenes que marcarían la historia del siglo XX.
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