05 Oct

El Establecimiento de Alfonso XII y el Sistema Canovista

Cánovas preparó la vuelta de los Borbones haciendo que Isabel II renunciara al trono en favor de su hijo, Alfonso XII. Cánovas, admirador del sistema político inglés, envió a Alfonso a estudiar a Inglaterra. Desde allí, el 1 de diciembre de 1874, Alfonso emitió el Manifiesto de Sandhurst, donde proponía una monarquía parlamentaria. El 29 de diciembre de 1874, Martínez Campos se pronunció en Sagunto a favor de Alfonso XII. Serrano renunció, y se instauró un consejo de regencia presidido por Cánovas. Así comenzó la Restauración.

El sistema canovista se basaba en la alternancia pacífica de dos partidos: el Conservador, liderado por Cánovas (sufragio censitario, defensa de las tradiciones, y apoyo de la clase alta) y el Liberal, liderado por Sagasta (sufragio universal, reconocimiento de derechos y deberes, desarrollo económico, y apoyo de la clase media y burguesía). Este sistema se conoció como turnismo. Los caciques manipulaban las elecciones para asegurar la victoria del partido designado. El pucherazo, una práctica fraudulenta, se utilizaba para imponer al candidato, llamado encasillado.

La Constitución de 1876

La Constitución de 1876 estableció Cortes bicamerales (Congreso y Senado). El tipo de sufragio para el Congreso no se especificaba en la Constitución. En el Senado, los senadores de derecho propio eran nombrados por el rey, junto con los mayores contribuyentes del reino. El sufragio en el Senado era censitario con los conservadores y universal con los liberales. En 1890 se aprobó el sufragio universal masculino. La Constitución también establecía la confesionalidad católica del Estado, con libertad de cultos en privado, derecho de asociación, libertad de imprenta, expresión y derecho de petición, aunque limitados, y soberanía nacional.

El rey tenía amplios poderes: controlaba el orden público, las fuerzas armadas y la difusión de las leyes. La organización del Estado incluía municipios controlados por ayuntamientos y provincias por diputaciones. El rey tenía derecho de veto, podía suspender las Cortes y nombraba a los ministros.

Conflictos y Regencia de María Cristina

Martínez Campos redujo la resistencia carlista en Cataluña, Aragón y Valencia. En 1876, con la toma de Montejurra y Estella, terminó la Guerra Carlista, anulándose los fueros vascos y navarros. En 1878 se firmaron acuerdos con el País Vasco y Navarra. Ese mismo año finalizó la Guerra de Cuba con la Paz de Zanjón, que abolía la esclavitud y prometía reformas políticas y administrativas. El incumplimiento de estas reformas provocó el levantamiento de 1879, conocido como la Guerra Chiquita.

En 1885, Alfonso XII murió. Comenzó la regencia de María Cristina de Habsburgo, ya que su hijo aún no había nacido. Cánovas y Sagasta firmaron el Pacto del Pardo para mantener el sistema. Desde 1885 hasta 1900 gobernó el Partido Liberal, período conocido como el Gobierno Largo. En 1887 se estableció la Ley de Asociación, en 1888 se abolió la esclavitud en Cuba, y en 1890 se instauró el sufragio universal masculino para los municipios. En 1897, Cánovas fue asesinado por un anarquista, y el Partido Conservador pasó a ser liderado por Silvela.

Durante la regencia de María Cristina, España perdió sus últimas colonias, lo que provocó una crisis del sistema. En 1899, el gobierno de Silvela emprendió reformas para mejorar el sistema: fomento de la agricultura y la educación, descentralización administrativa, equilibrio presupuestario, y regulación del trabajo de mujeres y niños. En 1901, Sagasta volvió al gobierno, y en 1902, Alfonso XIII alcanzó la mayoría de edad.

La Restauración en Castilla-La Mancha

El caciquismo fue una característica destacada en Castilla-La Mancha, facilitado por el alto índice de analfabetismo. Algunos caciques importantes fueron el Conde de Romanones en Guadalajara, los Arribas en Cuenca, los Medrano en Ciudad Real, y López Chicheri y Ochando en Albacete. A principios del siglo XX surgieron grupos que buscaban unir las provincias en torno a Castilla, dejando fuera a Albacete, que se uniría a Murcia o a La Mancha. En 1906 se fundó en Madrid el Centro Regional Manchego, y aparecieron periódicos como El Defensor de Albacete y Vida Manchega en Ciudad Real. Estas reivindicaciones continuaron hasta la dictadura de Primo de Rivera.

Oposición Política al Régimen de la Restauración

Carlistas

Tras su derrota, los carlistas se dividieron en dos grupos: uno que seguía conspirando desde el exilio en Francia, liderado por el pretendiente al trono, y otro que optó por la vía política, culminando en 1888 con la formación del Partido Tradicionalista, presidido por Nocedal.

Republicanos

Los republicanos se dividieron en varias tendencias:

  • Partido Posibilista: liderado por Castelar, buscaba un acercamiento a la monarquía.
  • Partido Republicano Progresista: con Ruiz Zorrilla, partidario de los pronunciamientos.
  • Partido Nacionalista Federal: con Pi y Margal.
  • Partido Republicano Nacionalista Federal Catalán: con Almirall.

En 1893, los republicanos intentaron unirse, pero perdieron apoyo popular, que se desplazó hacia el movimiento obrero.

Movimiento Obrero

El movimiento obrero se dividió entre anarquistas y socialistas.

  • Anarquistas: Optaron por la vía terrorista o sindical. Destacó la FTRE (Federación de Trabajadores de la Región Española), fundada en 1881. En la vía terrorista, se produjeron atentados como el asesinato de Cánovas, bombas en el Liceo y el asesinato de Martínez Campos. La respuesta del gobierno fue la represión, como en los Procesos de Montjuïc. En la vía sindical, se creó Solidaridad Obrera en 1907, y en 1910, la CNT.
  • Socialistas: Con mayor presencia en Madrid, Vizcaya y Asturias. Pablo Iglesias fundó el PSOE en 1879. En 1910 obtuvieron su primer escaño. Su sindicato fue la UGT (Unión General de Trabajadores), fundada en 1888.
  • Sindicatos Católicos: La Iglesia creó sindicatos como los Círculos Católicos y el Consejo Nacional de Corporaciones Católicas.

Nacionalismos y Regionalismos

Surgieron movimientos nacionalistas y regionalistas que defendían sus lenguas y culturas frente al centralismo de Madrid.

  • Cataluña: Vinculados a la burguesía industrial y la Renaixença. Pi y Margall inició el movimiento, seguido por Almirall, quien fundó el Centre Català en 1882. El Memorial de Greuges de 1885 denunciaba la opresión catalana. En 1891 se fundó la Unió Catalanista, que redactó las Bases de Manresa. En 1901 apareció la Lliga Regionalista, con Prat de la Riba y Cambó.
  • País Vasco: Surgido tras la supresión de los fueros y la inmigración. En 1895, Sabino Arana creó el concepto de Euskadi. Se fundó el PNV y el sindicato Solidaridad de Trabajadores Vascos.

Otros regionalismos surgieron en Galicia (ligado al Rexurdimento y al minifundismo), la Comunidad Valenciana (con el movimiento Valencia Nova) y Andalucía (ligado al latifundismo y los problemas sociales).

La Crisis de 1898 y la Liquidación del Imperio Colonial

Tras la Guerra Larga (1868-1878) y la Guerra Chiquita (1879), la situación en Cuba seguía tensa. La economía cubana estaba controlada por España, lo que generaba descontento, especialmente entre los Estados Unidos. En 1892, José Martí fundó el Partido Revolucionario Cubano (PRC). En 1895 estalló la Guerra de la Independencia de Cuba, liderada por Gómez, Maceo y Martí. España envió a Martínez Campos y luego a Weyler, quien aplicó métodos represivos. A pesar de las concesiones españolas (sufragio universal, autonomía, igualdad entre peninsulares e insulares, y autonomía arancelaria), la lucha continuó.

En 1897, se produjo un levantamiento en Filipinas liderado por Andrés Bonifacio y José Rizal. España envió a Polavieja, quien ejecutó a Rizal. La rebelión continuó hasta que Primo de Rivera firmó un acuerdo de paz.

En febrero de 1898, la explosión del buque Maine desencadenó la Guerra Hispano-Norteamericana. Estados Unidos derrotó a España en las batallas de Cavite y Santiago de Cuba. La Paz de París (1898) reconoció la independencia de Cuba, y cedió Puerto Rico y Filipinas a Estados Unidos. España vendió a Alemania las Marianas, Carolinas y Palao en 1899, liquidando así su imperio colonial.

Consecuencias de la Crisis del 98

La pérdida de las colonias generó una profunda crisis en España. Se cuestionó el sistema de la Restauración, se criticó al gobierno, al ejército y a la monarquía. El sentimiento de frustración y desencanto fue generalizado. Surgieron diversas propuestas para regenerar el país:

  • Regeneracionismo: Joaquín Costa, Basilio Paraíso y Picavea propusieron reformas en la educación y la economía. Costa abogó por la modernización de la agricultura, la construcción de infraestructuras y la redistribución de la tierra. Se creó la Unión Nacional de Productores en 1901.
  • Generación del 98: Escritores como Unamuno y Machado reflejaron la crisis española en su obra, criticando a los políticos y al sistema.
  • Novecentismo: Pensadores como Ortega y Gasset analizaron la realidad española y propusieron nuevas ideas.

El gobierno de Silvela introdujo algunas reformas, como el equilibrio presupuestario, la regulación del trabajo infantil y la creación de nuevos ministerios.

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