06 Oct
Esto ya reventó
Lo hemos logrado: la isla ha llegado a casi un millón.
Por todos lados voy siempre agobiado: chiquito follón.
Tan empetados que vas al mercado y parece Bangkok.
No cabe ni Dios.
Demasiado empetado x4.
Ya no cabemos más.
Las calles, las plazas, los bares, terrazas, todo a reventar.
Ya es como una plaga.
Hay más gente en Anaga.
Que dentro del Primark.
Canarión, si lo pillas, no quedan costillas en Casa Tomás.
Que no vengas más. Que no vengas más.
Demasiado empetado x4.
Si eres de los que no creen.
Que aquí somos demasiados.
Que la cosa no es pa’ tanto.
Que soy un exagerado: fíjate en lo cotidiano.
Que no hay hueco en ningún lado.
Sobra gente o falta isla.
Aquí vivimos empetados.
Cada vez hay más guachinches de esos que llaman modernos.
Haces cola 4 horas: pa’ atenderte es un infierno.
Poco a poco van logrando que el auténtico se pierda.
Al guachinche de verdad no se parecen una mierda.
A media isla verás si vas a una verbena o vas a un festival.
Da igual que sea El Row, La Misa, El Sunblast.
O la fiesta de la espuma del Escobonal.
Las romerías también: el que no va a bailar.
Pues, coño, va a comer.
Y es que se llena ya hasta la de San Matías.
Que no nos quedan vacas pa’ tanta romería.
Tenemos ya un millón de coches.
Dos por cada casa: ya no es la autopista.
La única que te retrasa.
Elija su cola desde Guaza hasta Guamasa.
Tiene usted Tegueste o la de Carrefour de Añaza.
Hay colas en la entrada de Las Galletas.
Y pa’ Las Teresitas ni en bicicleta.
No han arreglado aún lo que está en el suelo.
Y fantasean con un tren por el cielo, ooo.
Lo que también se llenó, sin duda alguna, fue la manifestación.
Canarias tiene un límite y se demostró.
Unidos con orgullo le gritamos: no, no, no.
Aunque nos mientan al contar las cifras de manifestantes.
Que poco mide aquí el metro cuadrado si hay pasta delante.
Pa’ coalición no es lo mismo contar.
Noches de carnaval cantando Juan Luis Guerra.
Que contar que el pueblo ha despertado y está en pie de guerra.
Petados y desbordados también por gente de fuera.
Nos vienen de todos lados: ya son demasiados pa’ tan poca tierra.
Unos que son los turistas traen llenas sus billeteras.
Los otros son pobres negros: las cuentas a cero.
Viajando en patera.
El caso más preocupante son los menores migrantes.
Aunque estén solo de paso, sufren el rechazo de cuatro ignorantes.
Racista, quisiera verte.
Si fuese un niño tuyo, el niño inmigrante.
Desde Barcelona hasta Madrid: vaya mierda de país.
Todos se lavan las manos.
Europa es que aún más asco da: si quieren, los tiro al mar.
Solo son seres humanos.
Al reparto dan un no rotundo: ustedes sí que son el tercer mundo.
De Europa soy el puente y el tapón.
La representación del racista millonario.
Viendo un mundo tan insolidario, tan racista y tan sectario.
Que paso de los canarios: normal que cada vez me sienta yo.
Más africano y menos español.
Ooo ooo ooo.
Donde ya no caben más.
No sé si lo habrás notado.
El Gobierno de Canarias.
Ese sí que está entullado.
Traje su organigrama.
Pa’ que los puedas contar.
Te voy a explicar la trama.
El tremendo panorama.
Que tenemos que aguantar.
Por Clavijo vamos a empezar.
¿Por qué? Porque es el presidente.
De ahí pa’ abajo te vas a encontrar.
¿El qué? Aun mogollón de gente.
Tenemos 12 consejerías.
Con asesores, secretarías.
Una unidad de coordinación.
Y jefes de gabinete.
Y en el fondo hay tres toletes.
Que no sé ni pa’ qué son.
Transparencia institucional.
¿Por qué? Pa’ tirar de la manta.
Unas de bienestar vegetal.
¿Qué es? Un rollo pa’ las plantas.
Espérate porque todo esto.
Se ramifica en departamentos: 89 hay en total.
Cada uno con dos equipos y 3500 tipos.
Que no hacen sino mamar.
La de agricultura está aquí.
Tremendos unos lumbreras.
Pasan de la papa del país: ¿y qué?
Y te las traen de fuera.
En cada equipo un comisionado.
Que es donde meten a los cuñados.
Grupo de apoyo al funcionariado.
Son los que van a por los cortados.
Departamento gestión de pagos.
Le pagan más al que sea más vago.
Mantenimiento y reparaciones.
Cerrado siempre por vacaciones.
Unos de apoyo a los emprendedores.
Con lo que pagas, muchos favores.
Departamento de apoyo a clubes.
Pa’ ver si un día el Tete sube.
Está el control de los pesticidas.
El que echa flix de toda la vida.
Departamento de dependencia.
Aquí las cosas van con paciencia.
Ecología y gestión de escombros.
Que hago, mi niño, los cargo al hombro.
Fuerte tinglado que se han montado.
Hay vividores por todos lados.
Esto sí es superpoblación.
De inútiles y ladrones.
Tocándose los cojones.
La madre que los parió.
bUU UU unnn dun dun Buu UU dun dun dun: es cemento donde hay naturalezas.
bUU uuu dun dun dun uuu uuu dun dun dun.
Es la cita que cancelan y a esperar seis meses más.
Es soportar que en los coles se amontonen los chiquillos pa’ estudiar.
Y los centros de menores, apuntito de explotar.
Residencias de mayores: ya no cabe un viejo más.
Es soportar que haya cada vez más gente y menos agua que beber.
Si a mí me cierran el grifo.
¿Por qué no vacía usted la piscina del hotel?
AAaa.
Es soportar que, aunque pagues un pastón, no encuentres un puto alquiler.
Que en los bancos de alimentos ya no quepa un alfiler.
Y es que donde comen dos, ahora te comen 33.
Cuando pegue el pepinazo.
Fijo que el que está de paso.
Con sus manos llenas, se manda a mudar.
Y yo aquí con mis dos manos: una alante y otra atrás.
Y es que no hay más.
No podemos, no cabemos: ya no hay nada que rascar.
Una isla solo crece hacia el cielo o hacia el mar.
Una isla solo crece cuando estalla su volcán.
Y cuando sale el pueblo entero.
A protestar, protestar, protestar, protestar, protestar.
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