14 Abr

Biografía de Max Weber

Primeros años y formación

Max Weber nació en Erfurt, Alemania, siendo el mayor de siete hijos. Debido a la vida pública de su padre, Weber creció en un ambiente familiar inmerso en la política, y su hogar recibió la visita de prominentes académicos y figuras públicas. Al mismo tiempo, Weber demostró ser intelectualmente precoz.

Weber estudió Derecho en la Universidad de Heidelberg y, posteriormente, en la Universidad de Berlín. Se incorporó a la fraternidad de su padre y escogió el campo de las leyes al igual que él. Aparte de estos estudios, tomó clases de economía y estudió historia medieval. Tras completar sus estudios, Weber se dedicó a la docencia.

Carrera y vida personal

Su padre murió en 1897 tras una fuerte discusión con Weber, con lo que nunca tuvieron la oportunidad de hacer las paces. Este evento provocó en Weber un profundo deterioro nervioso, obligándolo a disminuir y, eventualmente, detener su trabajo académico. No publicó un solo ensayo entre comienzos de 1898 y finales de 1902, y finalmente renunció a su cargo de profesor en la Universidad de Heidelberg en 1903. Sin embargo, continuó trabajando como profesor privado y gracias a una herencia pudo mantenerse.

El mismo año de su renuncia al cargo de profesor, Weber aceptó el cargo de editor asociado del Archivo de Ciencias Sociales y Bienestar Social (Archiv für Sozialwissenschaft und Sozialpolitik). En 1904, visitó los Estados Unidos y participó en el Congreso de las Artes y las Ciencias, celebrado junto a la Exposición Universal de San Luis.

Su trabajo más popular es “La ética protestante y el espíritu del capitalismo” (publicado inicialmente como ensayo en 1904 y 1905), el cual sentó las bases para su trabajo futuro sobre el impacto de la cultura y la religión en el desarrollo de los sistemas económicos.

Últimos años y legado político

En 1912, Weber intentó organizar un partido político de izquierda que combinase socialdemócratas y liberales, pero su intento fracasó debido al miedo que muchos liberales sentían hacia los ideales, considerados revolucionarios, de los socialdemócratas.

Años más tarde, durante la Primera Guerra Mundial y sus secuelas, Weber retomó la docencia, primero en Viena y luego en Múnich. Falleció de neumonía en Múnich en 1920.

La Concepción Burocrática según Weber

Max Weber ejerció una gran influencia tanto en la sociología burguesa contemporánea como en la concepción de los principios de administración y dirección, y en los autores reconocidos más importantes. El término burocracia describe, según Weber, un determinado tipo de organización social y las relaciones sociales que supone, en el cual el aspecto jerárquico administrativo a gran escala es el predominante. Consideraba la burocracia una forma de organización social, política y económica que, a su juicio, constituía el instrumento fundamental del progreso social y la racionalización en el mundo occidental.

Sus principales características, elaboradas y constituidas en principios de administración, han tenido una influencia en todas las actividades de la vida. Pero donde se hace más evidente es en las actividades cotidianas, en las instituciones y empresas modernas.

La Burocratización del Sistema Educativo

Los enfoques inspirados en Weber no han dado lugar a una amplia literatura específica sobre el tema de la educación. Cuando lo han hecho, se trata de una reflexión muy vinculada al ámbito de la producción, de la profesionalización y la obtención de credenciales. Lo que aquí vemos es la teoría del credencialismo en sus versiones fuerte y débil. No obstante, la idea de Weber sobre la burocracia ha tenido alguna proyección en el estudio de la escuela como organización racional-burocrática.

Weber apenas se ocupa de modo explícito de la educación en sus obras principales. Es, sobre todo, en su sociología de la religión donde aborda aspectos relacionados con la transmisión cultural y la formación de especialistas, aunque sin apenas mencionar directamente la educación formal.

La Teoría de la Dominación

La dominación es una construcción social, y estudiar los mecanismos de creación de la docilidad resulta imprescindible en cualquier teoría sobre el poder. Según Weber, el orden social existe porque se han encontrado mecanismos para hacerlo legítimo y deseable para los humanos.

La escuela, la familia y la iglesia constituyen, desde esta perspectiva, asociaciones de dominación.

Por dominación se entiende un estado de cosas por el cual una voluntad manifiesta (mandato) del dominador o de los dominadores influye sobre los actos de otros (los dominados), de tal suerte que en un grado socialmente relevante estos actos tienen lugar como si los dominados hubieran adoptado por sí mismos y como máxima de su obrar el contenido del mandato.

El Sistema Educativo como Asociación Hierocrática

Weber distingue un tipo particular de asociación de dominación a la que llama asociación hierocrática. Esta consiste en una asociación que aplica la coacción psíquica para garantizar su orden, lo cual lleva a cabo concediendo o rehusando bienes de salvación.

En el contexto educativo, los bienes de salvación que concede la escuela son los bienes culturales (conocimientos, títulos, certificados), que son establecidos y legitimados por la misma institución, de modo que a menudo excluye o devalúa otras formas de cultura o saber.

Según Weber, el sistema de enseñanza formal y burocratizado aparece cuando se dan cuatro condiciones:

  • Cuando existe un cuerpo de especialistas permanentes (profesores, administradores) cuyos ingresos, promoción, deberes y conducta profesionales vienen sometidos a una reglamentación propia.
  • Cuando se da una pretensión de dominio universalista: superación del hogar, del clan y de las fronteras étnico-nacionales en la transmisión del saber legitimado.
  • Cuando ese cuerpo de especialistas tiene una formación uniforme y un reclutamiento regulado (credenciales, oposiciones).
  • Cuando sus miembros aparecen como funcionarios portadores de un carisma (de función) que les trasciende y que es propiedad de la propia institución educativa.

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