12 Nov

Mecanismos de Defensa

Regresión: Se pretende volver a una fase anterior del desarrollo ante situaciones de estrés o ansiedad (ej., un niño al nacer su hermano se comporta como si fuese más pequeño para recibir más afecto).

Desplazamiento: Se descargan sentimientos hostiles sobre personas u objetos que no suscitaron las emociones.

Sublimación: Según Freud, muchos impulsos considerados por el sujeto como inaceptables (impulsos agresivos y sexuales) son desviados hacia actividades aceptadas como superiores o sublimes (ej., el deseo sexual puede sublimarse escribiendo cartas de amor).

Etapas del Desarrollo Psicosexual

El psicoanálisis postula las etapas a través de las cuales se va consolidando la personalidad. Son de especial importancia los primeros años de vida. La búsqueda del placer tiene aquí un papel decisivo. En cada etapa el individuo lo obtiene de manera diferente:

  • Etapa oral (0-2 años): La obtención del placer se centra en la zona de la boca. El niño solo vive para el placer; cuando no se le procura este, llora con el fin de que los padres satisfagan el impulso.
  • Etapa anal (2-4 años): Aparece cuando se intenta fijar en el niño unas normas de control de los esfínteres.
  • Etapa fálica (4-6 años): Se desplaza el interés hacia los genitales, se establece la diferenciación entre la psicosexualidad masculina y femenina. Aparece el llamado «complejo de Edipo» (chico-madre) y el «complejo de Electra» (chica-padre).
  • Etapa de latencia (6-12 años): Los impulsos se mantienen en un estado de quietud, se calman y se olvidan los conflictos vividos anteriormente.
  • Etapa genital (+ de 12 años): Los cambios fisiológicos provocan un resurgimiento de la pulsión sexual que se dirige hacia las relaciones sexuales con otras personas. El proceso de búsqueda de la identidad personal, la socialización, las actividades del grupo y las primeras manifestaciones de atracción sexual son características de esta etapa.

Trastornos de la Personalidad

Esquizofrenia

Se trata de una distorsión del pensamiento por la que el individuo se siente controlado por fuerzas extrañas, posee ideas delirantes (falsas e irracionales) y una alteración de la percepción (sensación de extrañeza frente al mundo externo cotidiano, que aparece como irreal) y el afecto (falta de reacción ante estímulos emocionales). Son personas incapaces de afrontar algunas situaciones cotidianas de la vida y mantener un adecuado contacto con la realidad, que niegan de forma inconsciente. A veces presentan alucinaciones e ideas absurdas de persecución. Presentan una grave desorganización en su vida personal y un comportamiento apático.

Personalidad Histriónica

Son personas que buscan llamar la atención a través de un comportamiento teatral que tiene por objeto establecer relaciones superficiales. Por ello, exageran sus emociones para causar simpatía o provocar.

Narcisismo

Son personas que poseen un sentido de superioridad y una creencia exagerada en su propio valor o importancia. Son extremadamente sensibles al fracaso o a la crítica, respondiendo ante estas situaciones con rabia o depresión. Presentan una necesidad exhibicionista de atención y admiración, y piensan que los otros les envidian. Sienten que sus necesidades merecen ser satisfechas antes que las de los demás y de manera inmediata.

Personalidad Antisocial (Psicopática)

Muestran una insensibilidad y un desprecio notable por los sentimientos de los demás, lo que les lleva a causar daños a sus semejantes sin sentir culpabilidad. Son deshonestos, mentirosos, impulsivos e irresponsables, y utilizan en su beneficio a sus prójimos sin remordimiento alguno. No toleran la frustración y reaccionan con violencia. El castigo no modifica sus conductas.

Personalidad Evitadora

Son sujetos hipersensibles al rechazo social, la humillación o la venganza.

Personalidad Dependiente

Son individuos sin confianza en sí mismos, inseguros, anteponen las necesidades de los demás a las suyas y no son capaces de expresar sus opiniones por temor a ofender. Subordinación e incapacidad para valerse por sí mismos.

Personalidad Obsesivo-Compulsiva

Son personas ordenadas y metódicas, muy responsables y exigentes consigo mismas (no toleran sus errores). Tanta responsabilidad les crea ansiedad y les impide encontrar satisfacción en sus tareas. Destacan en el ámbito laboral, pero no es raro el fracaso en sus relaciones personales o ante situaciones impredecibles que no controlan.

Trastorno de Identidad Disociativo (Trastorno de Personalidad Múltiple)

Consiste en que el sujeto se comporta como si tuviera dos o más identidades, manifestando cada una de ellas con cierta coherencia.

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