17 May

Trabajo de Campo

Durante el trabajo de campo, el investigador participa en la vida cotidiana de una cultura distinta, observa, registra, trata de acceder al punto indígena y escribe.

El trabajo de campo consiste más en un aprendizaje espontáneo que en una investigación consciente. Cuando nos adentramos en una cultura distinta a la nuestra, ella nos informa más de lo que nuestra memoria consciente cree, quedando impregnada de un saber, una sensación íntima de conocer el guion de los acontecimientos que se desarrollan a nuestro alrededor. La experiencia nos permite decir qué va a pasar e impide que ignoremos las reglas implícitas de la cultura.

El trabajo de campo permite al antropólogo no librarse a creaciones arbitrarias, no proyectar sobre una realidad social lo que él desearía ver en ella, no favorecer sus intereses subjetivos o los de sus informadores privilegiados. En su esfuerzo por alcanzar la subjetividad, debe dejar de lado sus costumbres y definir su misión.

El investigador no solo sintetiza los datos sensibles, también tiene que modificarlos. Incitar a un informador a que formule una explicación a partir de indicios, tanto verbales como no verbales, y con ello crear una representación.

La realidad no viene dada sino que es construida por el investigador, por tanto, este, bien formado, hará un esfuerzo por cuestionar sus propias clasificaciones, sus propias estructuras de la realidad, para asegurarse de que no está fabricando él mismo el objetivo que pretende estudiar. Procurará multiplicar los puntos de vista sin aspirar a abarcar la totalidad del objeto.

El antropólogo observa una y otra vez cómo le son impuestos temas y su talento consiste en mostrarse receptivo a ellos.

Los datos etnográficos se construyen a partir de una tensión entre lo dicho y lo no dicho, y entre los saberes que cada una de las partes atribuye a la otra. El antropólogo debe escuchar, crear un espacio en el que se expresen valores, interrogantes y dudas del informador.

La Lectura

El programa del antropólogo, en el trabajo de campo, consiste en tratar de comprender una sociedad, observando comportamientos y analizando discursos. Su esfuerzo por comprender lo hace a través de la comparación de sus anotaciones con un saber ya acumulado en la literatura, a propósito de otras formas sociales, en el tiempo y en el espacio.

El antropólogo debe gestionar una cierta tensión entre el diálogo que mantiene sobre el tema con sus interlocutores y aquel que mantiene con sus autores. No debe sofocar sus experiencias de campo por lo que ya sabe y a su vez estimula su curiosidad gracias a su cultura antropológica.

Todo investigador está situado, determinado por su propia cultura, pero precisamente trata de traspasar sus límites, entabla un diálogo con los autores de otras épocas, otros lugares y otros campos disciplinarios.

Los clásicos de la antropología han envejecido y, en su lectura, nos hacen revivir la época de sus escrituras, pero al mismo tiempo nos dicen algo de la condición humana. Es necesaria una doble lectura: la del texto en el contexto cultural de la época y la que podemos hacer gracias a los acontecimientos adquiridos desde entonces. Debemos leer y releer. Es importante regresar al texto, no contentarse con resúmenes de resúmenes.

Para un antropólogo, la lectura desempeña un papel fundamental en el aprendizaje de una cultura profesional constituida por un conjunto de conocimientos, de disposiciones con una dimensión ética, de valores, de principios prácticos.

La Escritura

La lengua y la escritura acarrean consigo unas tradiciones de pensamiento que condicionan sus miradas, sus concepciones del mundo, sus ideas de la realidad.

La escritura se esfuerza por ser neutra, imparcial e incluso hasta cierto punto impersonal. Los antropólogos han afrontado la cuestión crucial del modo de exposición de los resultados de la investigación.

El hecho de reconocer que la escritura no es algo inmutable ha tenido repercusiones en el modo de abordar y definir las ciencias humanas.

Los antropólogos se esfuerzan por exponer los itinerarios que les han llevado a pensar lo que piensan. Tratan de explicar el vaivén entre teoría y campo.

Los textos conceden más espacios a otras voces aparte de la del investigador, como las de los interlocutores sobre el terreno, filósofos, escritores, etc.

Sabemos que todo enunciado es relativo a un contexto, es contingente a la personalidad del investigador y de los informadores, está sujeto a variantes, sometido a múltiples azares.

El antropólogo intenta recoger el punto de vista femenino, no ignorar a los débiles, a los dominados.

Técnicas distintas a la escritura, como el cine o el video, ofrecen la posibilidad de transmitir los ambientes, de dar la palabra, de interactuar, de seguir el desarrollo de una acción, pero los efectos de la realidad no son más fáciles de lograr en el cine que en la literatura. Tanto en un caso como en otro nos encontramos frente a un discurso construido.

Superar las Falsas Alternativas

El trabajo de un antropólogo no ha parado de recibir críticas. Publicaciones recientes destacan el carácter ficcional de las nociones globales de los antropólogos evolucionistas, difusionistas, estructuralistas y sus seguidores.

No es interesante declarar que todo es ficción y que la ficción está en todo. Decir que todo texto es una construcción es un truismo, proclamar que un texto de ciencias humanas es ficción es un abuso del lenguaje o un efecto retórico.

Ficción es donde el autor manifiesta su intención de inventar algo de forma consciente y deliberada, lo que da a leer es la ingeniosidad de una historia inventada. Esta puede inspirarse en la realidad, pero el referente se plantea claramente como imaginario.

Podemos considerar los materiales de una investigación como artefactos producidos por el investigador y no como datos, sin por ello dejar de admitir que algo de la realidad exterior se resiste a las especificaciones de la investigación, además que aspiran a un conocimiento objetivo.

Pero al fin y al cabo, ¿qué es la realidad? La realidad es una construcción. No está dada así porque así, sino que al final como científicos ponemos atención a aspectos concretos de la realidad. Así se construye una realidad para intereses determinados. La realidad es aquello de lo que se habla. Es una construcción social. Nuestra manera de investigar y lo que abordamos, son construcciones sociales de la realidad y la realidad es una construcción social.

Método Cuantitativo

Trata de describir y explicar los hechos sociales desde sus manifestaciones externas. Con lo que desde esta vía se aborda el nivel de los hechos o fáctico del contenido de la realidad social en el que son perceptibles y registrables a partir de la observación del investigador.

El investigador, primero, observa los hechos sociales tal y como se muestran en su exterioridad, después los nombra de una forma unívoca y denotativa para terminar registrándolos ya no como hechos sino como datos de una matriz que cruza individuos por respuestas.

La herramienta mediante la cual se matematiza este proceso es la encuesta estadística, con ella conseguimos sustituir el hecho social por un enunciado verbal, con un único significado y el hecho se transforma en dato (número).

Este método deja de lado todo aquello que no puede ser matematizado por lo que se pone de manifiesto la imposibilidad de medir la dimensión connotativa del lenguaje.

Es útil para el nivel de los hechos o fáctico pero inútil para el nivel discursivo.

Método Cualitativo

Es empírico pues parte de la observación, de los hechos, para construir sus interpretaciones.

Trata de un análisis e interpretación subjetiva de los fenómenos y situaciones sociales a partir de un discurso. No se busca en el exterior del comportamiento humano sino en la lógica de su interioridad.

Es el más adecuado para acceder al nivel de los discursos o significados. Nivel en el que quedarían expresadas las razones subjetivas de la acción social y del comportamiento.

Se busca la cualidad y forma de los hechos sociales, el número da paso a la palabra, al lenguaje, el cual será instrumento y objeto de conocimiento a la vez.

El método se ocupa de las relaciones entre los elementos, de su estructura.

En resumen, este método funciona de dos formas:

El investigador intenta reproducir los discursos de determinados grupos sociales, comunidad o colectivo. O produce o recopila documentos referidos al ámbito o población en el que se centra la investigación. Y se analiza e interpreta la información recogida.

Método Etnográfico

Intenta estudiar las distintas sociedades y grupos a partir del análisis de sus producciones culturales, los productos materiales, las intenciones y conductas sociales y los productos simbólicos.

Estrategia del Diseño Etnográfico

  • Proporcionar datos fenomenológicos: recoger información sobre los fenómenos sociales y sus significados.
  • Tener un carácter empírico y naturalista: basarse en las observaciones y las técnicas de recogida de datos.
  • Conocimiento holístico: conocimiento global e integrador de las distintas dimensiones que configuran la sociedad.

La principal herramienta es la observación: el investigador observa lo que acontece, lo registra y después analiza la información y elabora conclusiones.

Método Biográfico

Se sirve de una serie de documentos orales y escritos que ayudan a conocer tanto las experiencias vitales de una persona como su interpretación subjetiva.

Entre los documentos bibliográficos distinguimos varios tipos:

  • Documentos personales: biografías, vida de una persona contada por un tercero o autobiografía, relatada por uno mismo. Estas últimas tienen varias formas:
    • Memorias: acontecimientos de la vida del autor.
    • Confesiones: aspectos inusuales de carácter íntimo o reservado.
    • Apologías: objetivo es justificar o ensalzar las ideas o la vida del autor.
    • Epistolarios: cartas que tratan buena parte de la vida del autor.
    • Diarios: registro continuado de la vida del autor considerados relevantes.
  • Relatos de vida o historias de vida: un investigador reconstruye la trayectoria vital de una persona a través de relatos en primera persona o de otros documentos externos producidos por terceros.
  • Biogramas: registro biográficos centrados en determinados aspectos que han sido extraídos de numerosas biografías solicitadas por parte del investigador.

Método Histórico

Se busca interrogarse o interrogar a la realidad social, acerca del cursus sufrido por aquello que estudia, sobre cómo ha llegado a ser como es, e incluso por qué ha llegado a serlo.

Las tecnicas que se utilizan son:

documentos escritos: produciodos en el seno de la comunidazd o poblacion que se va a estudiar. Principalmente escritos por la propia poblacion, historiadores de la epoca, documentos preodisticos o administrativos.

Documentos graficos: fimaciones de la epoca, peli, fotos, mapas, dibujos, geneanologias.

Tradiciones orales. Testimonios del pasado transmiytidos de coca en boca.poesias, caacionesm cuantos, mitos.

A la hora de analizar todos estos documentos, el investigsador debe preguntarse que funcion cumple la tradicion

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