TEATRO DEL Siglo XVIII

El teatro en la primera mitad del siglo se basaba en representaciones similares a las del siglo anterior y las obras más vistas eran las comedias de magia (obras con trucos escénicos como apariciones, desapariciones, transformaciones…), comedias heroico-militares (recuerdan glorias nacionales y ambientes exóticos llevando a escena desfiles y batallas), comedias de santos (ponen en escena vidas de santos al principio y después de una conversación ocurren apariciones y visiones) y comedias de figurón (se centran en una situación caricaturesca que origina el enredo; se exagera a personajes para producir efectos cómicos).

A mediados de siglo hubo polémicas ya que los ilustrados pretendían conseguir un teatro racional y educativo, defendieron tragedias y comedias más racionales, sometidas a normas y con un mayor contenido ideológico, que diesen ejemplos morales de conducta a su público.

En las dos décadas finales del Siglo XVIII hubo un acercamiento entre los grupos mayoritarios y las propuestas neoclásicas ya que se logró inventar un género intermedio denominado comedia sentimental o lacrimógena. En este tipo de obras se apela directamente al sentimiento para provocar la identificación del espectador con el tema. Los ilustrados apoyaron este género ya que tenía un fin moral, era verosímil, empleaba argumentos simples y personajes de la vida cotidiana. Un ejemplo de este tipo de obras es “El delincuente honrado” de Jovellanos.

Leandro Fernández de Moratín (1970-1828) nacíó en Madrid y fue un dramaturgo considerado el mayor representante del teatro ilustrado español. Integro la sátira de vicios y errores comunes de la sociedad con un desenlace sentimental en el que triunfaba la verdad y la virtud para el autor.
El tema principal de sus obras fue la inautenticidad como forma de vida expresada en los matrimonios concertados por interés, la educación de las jóvenes y el teatro de la época. 

El sí de las niñas es una obra que refleja los rasgos lustrados debido a su carácter didáctico. En la obra se integran con naturalidad la inteligencia y el sentimiento. Trata sobre un matrimonio concertado en el que al final la dama decide renunciar al matrimonio y el conflicto se resuelve de modo que triunfa la verdad.

El Romanticismo es el movimiento artístico y cultural que dominaba la creación cultural en la primera mitad del Siglo XIX. Fue un movimiento antinormativo que se opónía al Racionalismo del Siglo XVIII. Sus precedentes están en el pensamiento de un grupo de jóvenes alemanes que veían en la imaginación y la pasión el origen de una fuerza creativa.

En su visión del mundo destacaban la subjetividad y el idealismo (la exaltación del yo, la sensibilidad individual y los sentimientos apasionados; el idealismo desea alcanzar lo sublime en el amor, la belleza y la libertad)
, la rebeldía (debido a la insatisfacción con la realidad), la libertad (se defiende la plena libertad en todos los ámbitos: político, moral y artístico), la naturaleza (se emplean elementos para expresar el desasosiego anímico del autor) y el nacionalismo (la afirmación de la identidad individual se corresponde con la búsqueda de una entidad colectiva).

Los temas principales que trata el Renacimiento son los sentimientos apasionados y absolutos (pasión del amor, desengaños, belleza ideal, muerte…) y también era frecuente la rebeldía y la crítica política donde se veía el desafío a las normas como era propio de este movimiento.Las etapas del Romanticismo en Europa son: el Prerromanticismo (a finales del Siglo XVIII donde algunos autores tratan los sentimientos individuales y la intimidad; iba en contra de las normas de creación neoclásicas), el Romanticismo pleno (a principios de Siglo XIX se ve por un lado la corriente ideológica conservadora que buscaba en el pasado los auténticos valores y la corriente ideológica progresista que defendía la democracia y la libertad plena) y el Posromanticismo (en la segunda mitad del Siglo XIX se ve una literatura que se preocupa por la realidad social y algunos escritores hablan de la exploración de los sentimientos íntimos.Las etapas del Romanticismo en España son: las primeras décadas del Siglo XIX (prevalece la literatura del siglo anterior y escritores europeos veían el pasado literario español especialmente en el ROMántico), desde 1833 hasta 1840 (autores como Espronceda y Larra que eran progresistas y Zorrilla y el duque de Rivas que eran conservadores se difunde en España el Romanticismo del resto de Europa) y a partir de 1840 (el movimiento gana terreno aunque las obras de autores como Rosalía de Castro y Bécquer no se publican hasta la segunda mitad de siglo).Johann Wolfgang Goethe (1749-1832) fue uno de los escritores alemanes más destacados. Fue humanista, científico, filósofo, ministro y bibliotecario. Su mejor obra dramática fue “El Fausto” que ha pasado a ser una obra clásica de la literatura universal. Goethe compuso las obras literarias más influyentes en el desarrollo de la literatura alemana y del pensamiento, encabezando el movimiento cultural de la Revuelta ROMántica.