19 Oct

Platón

Biografía y Obra

Los diálogos de Platón se clasifican en 4 períodos atendiendo a su relación con Sócrates y su pensamiento:

  • Período de juventud: Diálogos en los que se discuten problemas éticos tratando de ensalzar la figura de Sócrates.
  • Período de transición: Platón empieza a elaborar sus propias doctrinas. Predominan los problemas políticos (Sócrates enfrentado a los sofistas, y por lo tanto, a la democracia). Primeros esbozos de la teoría de las Ideas.
  • Período de madurez: En esta época, Platón redacta sus diálogos fundamentales. Platón ya tiene completada su teoría de las Ideas en su libro República, donde describe su modelo de Estado justo, utópico e ideal.
  • Período crítico o de vejez: Somete a revisión todos los conceptos anteriores. Platón realiza una revisión de la teoría de las Ideas con diálogos críticos.

Contexto filosófico

Platón desarrolla su pensamiento en Atenas. En este período se pueden delinear dos corrientes de investigación fundamentales que marcan el desarrollo del pensamiento griego. La primera se inicia con las reflexiones cosmológicas de los filósofos presocráticos que sientan las bases del pensamiento racional al tratar de buscar el origen del cosmos en la propia physis desde la racionalidad y no desde relatos míticos. En la segunda, los sofistas y Sócrates investigarán los problemas éticos y políticos del ser humano. Ambos problemas serán recogidos por Platón y Aristóteles.

La filosofía de Platón tiene una finalidad ética y política. Su pensamiento pretende buscar un Estado justo e ideal gobernado por filósofos. El fundamento filosófico de este proyecto está en la Teoría de las Ideas.

Cosmos, realidad y conocimiento de Platón

La concepción de la realidad de Platón está íntimamente ligada a su concepción del conocimiento. Ambas aparecen integradas en la teoría de las Ideas, que es el fundamento filosófico de todo su sistema. Con esta teoría Platón trata de ofrecer una solución conciliadora a los problemas surgidos en la tradición filosófica anterior, como el planteado por Heráclito (la realidad está en constante devenir) y Parménides (el ser es eterno e inmóvil) y también se opone al relativismo y escepticismo de los sofistas al defender que existen la verdad y el bien y que pueden ser conocidos.

La teoría de las Ideas consiste en una interpretación de la realidad y del conocimiento basada en la existencia de dos mundos radicalmente distintos y separados. El mundo sensible es el mundo de las cosas materiales, imperfectas y múltiples que percibimos a través de los sentidos. El mundo inteligible es el mundo de las Ideas perfectas, únicas y eternas. Son las esencias o modelos de las cosas sensibles, son sustancias. Las Ideas están ordenadas jerárquicamente: en la cumbre está la Idea del Bien, debajo las Ideas de Belleza y Justicia, las Ideas matemáticas y las Ideas de cosas sensibles.

Conocimiento sensible (doxa)

  • Imaginación: Consiste en ver imágenes de las cosas.
  • Creencia: Consiste en la percepción de los objetos sensibles a través de los sentidos, que son estudiados por la Física, que para Platón no es considerada como ciencia.

Conocimiento inteligible (ciencia)

  • Pensamiento discursivo (dianoia): Es el conocimiento de los objetos matemáticos, propio del matemático, que sirve de hipótesis para representar dichos objetos. Es un conocimiento intermedio entre la opinión y lo inteligible.
  • Inteligencia (noesis): Es el grado superior del conocimiento y consiste en la captación racional e inmediata de las Ideas. Es el conocimiento propio del filósofo que, a diferencia del matemático, prescinde de hipótesis e imágenes sensibles.

En el pasaje del «símil de la línea», Platón expone los diferentes grados de conocimiento en relación con los grados de realidad. Platón explica el conocimiento como un proceso ascensional y gradual del alma a través de la dialéctica. En este proceso el alma se purifica y se libera del cuerpo hasta llegar a la Idea del Bien, que constituye la esencia y causa de toda la realidad y así alcanzar la verdadera sabiduría. La fuerza que impulsa al dialéctico es el amor (eros). Una vez alcanzado el conocimiento del Bien, el dialéctico iniciará un descenso intelectual. Lo que logra el dialéctico es una comprensión intelectual verdadera de toda la realidad y una forma de vida superior.

Antropología y política de Platón

La antropología platónica está muy vinculada a la ética y a la política. Su concepción del ser humano es dualista: el ser humano es un compuesto de cuerpo y alma, que son dos realidades distintas e independientes:

  • El cuerpo: Es mortal y cambiante. Es una cárcel para el alma, por eso el ser humano tiene que liberarse del cuerpo y purificar su alma para poder acceder al mundo de las Ideas.
  • El alma: Es inmortal, simple y eterna. Su actividad propia es la contemplación de las Ideas. Es la verdadera esencia del ser humano. Platón defiende la reencarnación y transmigración de las almas. El alma está estructurada en tres partes o funciones:
    • Alma racional: Inmortal, se sitúa en la cabeza. Su función es conocer las ideas. Su virtud es la sabiduría o la prudencia.
    • Alma irascible: Mortal, simboliza las pasiones nobles como la valentía, la fuerza y el coraje. Situada en el pecho. Su virtud es la fortaleza o valentía.
    • Alma concupiscible: Mortal, simboliza las pasiones innobles. Situada en el abdomen. Su virtud es la templanza.

Para Platón la ética tiene como finalidad que el individuo alcance la felicidad y esta se encuentra en la práctica de la virtud. Platón entiende la virtud en varios sentidos:

  • La virtud como sabiduría: la persona virtuosa y sabia es la que contempla y conoce las Ideas.
  • La virtud como purificación: la persona virtuosa es la que purifica su alma de las pasiones.
  • La virtud como equilibrio o armonía: la armonía se da cuando cada parte del alma cumple su función: la parte racional debe guiar a la parte irascible y ambas deben de guiar a la concupiscible. Esto es la justicia (diké) que es la virtud más importante de todas.

Platón, en el diálogo La República, describe el Estado justo e ideal gobernado por filósofos. El Estado platónico se compone de tres clases sociales:

  • Los gobernantes/filósofos: Con la virtud de la templanza, tienen como misión legislar y son los más aptos para gobernar.
  • Los guerreros: Con la virtud de la fortaleza, tienen como misión la defensa de la polis.
  • Los artesanos: Con la virtud de la templanza, son los encargados de producir los bienes materiales que necesita la comunidad.

La justicia es el pilar del Estado perfecto. Platón establece una clara correlación entre la justicia del Estado y la justicia del individuo, pues si la justicia en el individuo consiste en la ordenación de las partes del alma según la virtud de cada uno, en la ciudad consiste en que cada clase social cumpla con sus tareas.

En La República, Platón también elaboró una clasificación de formas de gobierno. La monarquía o aristocracia, es la forma más perfecta y justa, pues es el gobierno de los mejores. La decadencia de esta forma origina la timocracia. Cuando esta degenera da lugar a la oligarquía, minoría rica y codiciosa que explota a los otros hombres, pero estos, cuando se cansan, eliminan a los ricos y se apoderan del poder originando la democracia, en la que se impone una libertad moderada. Esta situación conduce a la tiranía.

El papel de Platón en la historia de la filosofía

Platón es una de las figuras más permanentes e influyentes de la historia del pensamiento occidental.

En la Antigüedad, Platón y su discípulo Aristóteles crearon los dos primeros grandes sistemas de filosofía: el idealismo, base de las filosofías racionalistas, y el realismo, base de las filosofías empiristas.

Atendiendo a su recorrido histórico, en el último período de la filosofía antigua se produce una revalorización del platonismo, con el neoplatonismo de Plotino, que realiza una síntesis entre el platonismo y el misticismo.

En la Edad Media, Agustín de Hipona realiza una síntesis entre el platonismo y el cristianismo.

En la filosofía moderna, René Descartes reproduce el idealismo platónico bajo la forma de racionalismo. En el Romanticismo, Hegel lo recreó en la forma del Idealismo Absoluto.

Deja un comentario