06 Nov
Rousseau: La Ilustración y su Crítica
Jean-Jacques Rousseau, figura clave en la Ilustración, expresó sus contradicciones. Su vida, marcada por el conflicto, plasmó en su obra preocupaciones ilustradas como la búsqueda de la felicidad y la libertad. Sin embargo, sus ideales románticos lo distanciaron de su época, convirtiéndolo en un crítico de la Ilustración. Para Rousseau, el sentimiento, no la razón, define la naturaleza humana. Denunció la artificialidad de la vida social burguesa, criticando la civilización como sinónimo de progreso. Cuestionó si el progreso cultural implicaba un progreso moral y felicidad, concluyendo que la cultura era una fachada que ocultaba la corrupción. Desconfiaba de la razón y el progreso, argumentando que la ciencia y la inteligencia no garantizaban el progreso humano. Las mejoras técnicas, según Rousseau, aumentaban el egoísmo y la competitividad, abandonando los sentimientos naturales del hombre. Concluyó que las ciencias y las artes corrompían al hombre, sin contribuir a su felicidad ni moral. La desigualdad e injusticia reinaban en la sociedad, donde «el ser humano se ve encadenado».
El Hombre: Estado Natural vs. Estado Social
Rousseau se planteó cómo la sociedad se volvió deficiente e injusta, cómo restaurarla y la naturaleza humana. Distinguió entre el estado de naturaleza y el estado social. El primero, un concepto sociopolítico, permitía comprender la estructura social, valorar el Estado y concebir una sociedad justa. El «hombre natural» guiaba la reforma política, indicando cómo la sociedad debía concordar con su naturaleza. El «estado natural», una hipótesis, describía al hombre antes de la sociedad. En este estado, los hombres vivían aislados, con sentidos más desarrollados que la inteligencia. La libertad y perfectibilidad los diferenciaban de los animales. Eran felices, sanos, e iguales, con diferencias naturales (fuerza, edad). Vivían en paz, sin posesiones ni pasiones. Eran amorales, sin vicio ni virtud, pero no inmorales, guiados por el amor a sí mismos y la piedad. El estado social, en cambio, corrompía al hombre, instaurando la injusticia y la falta de libertad. La propiedad privada era la raíz de la desigualdad.
Transición del Estado Natural al Estado Social
La sociedad, según Rousseau, pervierte al hombre. La unión para defender intereses (caza, defensa) llevó al asentamiento, la agricultura y la propiedad privada, creando la división entre poseedores y no poseedores. La fuerza se convirtió en el único límite, generando desigualdades y una «guerra de todos contra todos». Para proteger los bienes, se crearon leyes y Estados, un poder supremo que, en la práctica, protegía los privilegios de los ricos. El orden legal destruyó la libertad natural, estableciendo la propiedad y la desigualdad como origen del Estado. El hombre social, una perversión del natural, impulsó a Rousseau a buscar un sistema legítimo y racional.
El Contrato Social: Reforma Política
Rousseau buscó la forma de vivir en sociedad preservando la libertad natural, conjugando obligación y libertad. Su solución fue el Contrato Social, un pacto donde los hombres se asocian libremente, entregando sus derechos naturales a la comunidad para disfrutar de libertades y derechos. Consecuencias: los hombres se someten a la ley creada por ellos mismos, sin privilegios. La libertad reside en la vinculación de todos a la ley.
Voluntad General, Soberano y Gobierno
La voluntad general, fundamento del poder, representa los intereses generales, estableciendo leyes para el bien común. No es la suma de voluntades individuales ni la de la mayoría, sino la soberanía popular. El pueblo, fuente de ley, se somete a ella, siendo legislador y súbdito a la vez. La libertad es la autodeterminación, conformando la voluntad propia a la ley (voluntad general). La soberanía es inalienable e indivisible. Rousseau rechaza la democracia representativa, defendiendo la directa. El pueblo soberano ostenta el poder legislativo.
Soberano vs. Gobierno
El soberano (pueblo) toma decisiones políticas legítimas según la voluntad general. El gobierno ejecuta las medidas para hacerla realidad. La voluntad general crea leyes universales, mientras que el gobierno, con acciones individuales, necesita un poder ejecutivo para cumplir la ley.
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