25 Ene

Obra de 1936 a 1974: *Cinco horas con Mario*

*Cinco horas con Mario* es una novela escrita en 1966 por Miguel Delibes durante la dictadura franquista, época en la que todavía estaban presentes las dos Españas. La transformación de la sociedad y las relaciones exteriores obligaron al régimen a buscar legitimación política. Carmen y Mario representan a esas dos Españas: la tradicional y la progresista. La obra pertenece a la corriente literaria del siglo XX, concretamente a partir de los años 60, conocida como novela experimental. Es un claro ejemplo de las innovaciones formales propias de la época:

  • Novela de punto de vista único: reduce su ángulo de enfoque a un solo personaje, Carmen, gracias a quien conocemos a Mario por fuente indirecta y lo vamos componiendo por el método del contraste.
  • Tendencia a relegar el argumento a un planteamiento secundario y hasta a prescindir de la acción: expone en forma de monólogo los pensamientos de Carmen durante las cinco horas que transcurren en el velatorio de su difunto esposo. Carmen realiza una crítica de todo lo referente a su marido (trabajo, aficiones, amigos, personalidad…), a la vez que se ensalza a sí misma. Intenta justificarse ante él y evitar la confesión final, apoyándose en los defectos que encontró en Mario.

Desorden cronológico: se pasa de una temporalidad objetiva a una profunda cronología subjetiva. El tiempo es subjetivo, dura cinco horas, y gira en torno a acontecimientos repetidos y a momentos vividos que obsesionan a Carmen.

Personajes

El protagonista, Mario, se trata de un personaje en conflicto con su entorno y consigo mismo, deseoso de encontrar su identidad; siente un gran deseo de retorno a la juventud. Carmen está absorbida por la sociedad de consumo y la técnica, representada por Paco, que es la oposición a ese primitivismo con sus pisos confortables y su Seat 600. La diferencia cultural entre Carmen y Mario provoca una profunda diferencia en el pensar, una división en el sentir y en el obrar.

Características de la narración

  • Se combinan la primera persona, con un punto de vista restringido a Carmen, y la segunda persona narrativa y ficticia, referida a Mario.
  • Disminuye el papel del diálogo en función del monólogo interior.
  • Utiliza un lenguaje coloquial, con ciertos vulgarismos, al tratarse de un monólogo expuesto por una mujer de clase media provinciana, en medio de una fuerte alteración emocional.
  • Incorpora elementos ajenos al lenguaje de la novela, como la esquela funeraria con la que se abre la obra.

La Novela Española de 1939 a 1975

Al finalizar la Guerra Civil, el panorama de la novela era confuso y de gran desorientación. Algunos de los mejores novelistas del periodo anterior habían muerto, como Valle-Inclán o Unamuno, y otros se exiliaron, entre ellos Ramón J. Sender. Autores como Azorín y Baroja, que volvieron a España tras un breve exilio, siguieron escribiendo y publicando, pero sus obras no aportaron nada nuevo ni original. En estos años, se publicaron novelas de carácter triunfalista. Sin embargo, surgen en esta década de los años 40 dos novelas con una visión crítica de la realidad:

  • Camilo José Cela con *La familia de Pascual Duarte* inicia el tremendismo, una corriente que profundiza en los aspectos más crudos de la realidad.
  • Carmen Laforet con *Nada* inicia la novela existencial.
  • Miguel Delibes con *La sombra del ciprés es alargada*.

Años 50: Realismo Social

Los años 50 son de novelas realistas que reflejan y denuncian la situación social para que los lectores tomen conciencia de ello. El autor no sólo denuncia, sino que adopta una posición comprometida con la realidad. Predomina:

  • Simple narrador externo, objetivo, en tercera persona.
  • Diálogo para expresar el interior de los personajes, en el que se reproducen características del habla coloquial.
  • Protagonista colectivo.
  • Acción que transcurre en poco tiempo y en espacios reducidos, con una estructura sencilla y narración lineal.

Temas: el vacío y egoísmo de la burguesía, la dura y mísera vida del campo, la explotación del proletariado, la soledad e incomunicación del individuo, el éxodo rural y la vida en los suburbios, y la Guerra Civil vista desde la infancia o la adolescencia.

Autores:

  • Miguel Delibes: *El camino*.
  • Cela: *La Colmena*.
  • Rafael Sánchez Ferlosio: *El Jarama*.

Años 60: Novela Experimental

En los años 60 se conjugan varios factores que determinarán un cambio de rumbo en la novela. Por un lado, la sociedad española experimenta una transformación importante; por otro, comienza a percibirse que la literatura social es un medio inútil para cambiar la sociedad del momento y aparecen nuevos modelos narrativos. La novela experimental está más preocupada por los aspectos formales y lingüísticos que por la reproducción objetiva de la realidad.

Nuevas técnicas narrativas:

  • Narrador cambiante.
  • Monólogo interior y estilo indirecto libre.
  • Ruptura de la secuencia cronológica y participación activa del lector.
  • Innovaciones en la división del relato e inserción de *collages*.

Los personajes son seres conflictivos desde el punto de vista psicológico. El argumento se relega a un segundo plano y en él se da cabida a lo fantástico y onírico junto a lo real; a veces la anécdota se carga de significación simbólica.

Autores:

  • Luis Martín Santos: *Tiempo de silencio*.
  • Delibes: *Cinco horas con Mario*.
  • Goytisolo: *Señas de identidad*.
  • Juan Marsé: *Últimas tardes con Teresa*.
  • Cela: *San Camilo 1936*.

Años 70: Recuperación de la Trama

En los años 70 surgen escritores conocidos como la generación del 98. Sus características más importantes son:

  • Evolución hacia formas tradicionales donde se recupera el argumento, la trama y los personajes.
  • Se vuelve al uso de la primera y tercera personas narrativas y se recuperan los diálogos.
  • Los autores se desvinculan del compromiso social y político y reaparecen problemas humanos tratados desde la intimidad: soledad, amor, erotismo, relaciones personales…
  • Se acude a géneros menores.
  • Los temas transmiten una sensación de desencanto.

Autores:

  • Eduardo Mendoza: *La verdad sobre el caso Savolta*.
  • Vázquez Montalbán: *La rosa de Alejandría*.
  • Juan Marsé: *Últimas tardes con Teresa*.
  • Torrente Ballester: *La saga/fuga de J.B.*

La Poesía en las Últimas Décadas del Siglo XX en Hispanoamérica

En las últimas décadas del siglo XIX, los poetas hispanoamericanos presentan una nueva mirada. Desde 1960 coexisten tendencias poéticas muy variadas:

  • Surrealismo: Marco Antonio Montes de Oca y Enrique Molina.
  • Poesía comprometida: bajo la estela de Pablo Neruda, destacan Mario Benedetti y Álvaro Mutis.
  • Experimentalismo: aparece en Nicanor Parra y José Emilio Pacheco.
  • Existencialismo: presente en la poesía de César Fernández Moreno y Dulce María Loynaz.

La Novela Hispanoamericana: Evolución y Tendencias

En los países hispanoamericanos, el desarrollo de una narrativa propia fue más lento que el de la poesía. En los años 40, Hispanoamérica experimenta un crecimiento urbano y la vida cultural se enriquece con la llegada de intelectuales españoles republicanos. Así, comienza la superación del realismo. Se pueden distinguir tres etapas en la evolución de esta narrativa:

Realismo Tradicional (hasta 1940)

Hasta 1940 se mantiene la tendencia de la novela realista del siglo XIX, que se ambienta principalmente en el mundo rural. Sus rasgos característicos son:

  • Temas: búsqueda de la identidad nacional, afirmación de las raíces autóctonas, lucha por la vida, desigualdades sociales y problemas de indios y mestizos.
  • Personajes: esquemáticos, que representan tipos marginados, humildes, luchadores. Los protagonistas son personajes autóctonos en un espacio rural.
  • Técnicas narrativas: narrador omnisciente en tercera persona y alternancia de registros lingüísticos.

Existen dos tipos de novelas:

  • Novela regionalista: presenta pinceladas naturalistas y también matices de carácter romántico. Aparece una naturaleza de proporciones grandiosas y se presta atención a las peculiaridades de cada zona. Destaca Rómulo Gallegos. Sobresalen las novelas de la revolución mexicana, como *Los de abajo* de Mariano Azuela.
  • Novela indigenista: se escriben narraciones sociales reivindicativas que plantean el problema de la marginación del indio americano. Destaca Ciro Alegría.

Realismo Renovador o «Realismo Mágico» (a partir de los años 40)

A partir de los años 40 se inicia un camino de modernización en la manera de contar. Las causas son: la llegada de intelectuales españoles tras la Guerra Civil, la emigración europea, la fundación de Escuelas de Escritores y Liceos en varios países y la mezcla de tradiciones indígenas con el arte de vanguardia. Destacan dos autores en el desarrollo de la narrativa: Miguel Ángel Asturias y Jorge Luis Borges.

Rasgos:

  • Temas: se siguen utilizando temas anteriores, pero van surgiendo temas nuevos, como el interés por lo urbano, los problemas humanos y existenciales o la irrupción de lo imaginativo y fantástico.
  • Representación del mundo: admite al mismo nivel lo racional, lo onírico y lo fantástico.
  • Técnicas narrativas: mayor cuidado constructivo y estilístico. Interés por las innovaciones formales de grandes novelistas europeos y norteamericanos. Asimilación de elementos irracionales y oníricos. Variedad de personajes de distintas clases sociales.

Autores destacados:

  • Miguel Ángel Asturias.
  • Jorge Luis Borges.
  • Juan Rulfo.

El *Boom* de la Novela Hispanoamericana (años 60)

En los años 60 confluye una generación de escritores en diversos países hispanoamericanos que consigue crear una novela nueva. Surge el experimentalismo. La publicación de *La ciudad y los perros* en 1962 y de *Cien años de soledad* en 1967 marcan el inicio del movimiento.

Características:

  • Los temas y personajes coinciden con los del realismo mágico.
  • El espacio del relato sigue siendo principalmente rural, aunque hay novelas que se sitúan en ciudades.
  • Temas: la crisis existencial del individuo, la figura del dictador, la historia de Hispanoamérica.
  • Consolidación de la integración de lo fantástico y lo real.
  • Preferencia por una narrativa sumamente intelectual.
  • Resurgimiento de la narrativa breve.
  • Profunda experimentación en el uso de técnicas narrativas: cambios de espacio y tiempo, multiplicidad de narradores, fragmentación narrativa, expresiones indígenas, incorporación de la alegoría y la metáfora como base de la narración.

Autores:

  • Julio Cortázar: *Rayuela*.
  • Carlos Fuentes: *La muerte de Artemio Cruz*.

Narrativa Posterior al *Boom*

La narrativa posterior al *boom* se caracteriza por la diversidad de tendencias. Decrece el experimentalismo y se eligen discursos narrativos más transparentes para dar una visión de la realidad política y la crisis económica mundial.

Autores:

  • Alfredo Bryce Echenique.
  • Isabel Allende: *La casa de los espíritus*.

Narrativa del Siglo XXI

La narrativa del siglo XXI se caracteriza por la invasión de la tecnología y la distribución de la obra literaria. Se escribe sobre migración y traumas familiares, la homosexualidad o una revisión histórica de la identidad de los pueblos.

La Novela Española de 1975 a Finales del Siglo XX

A finales de 1975 muere Franco. Después de un periodo no exento de tensiones, en 1977 se celebran las primeras elecciones democráticas. La actual Constitución se aprueba en 1978 por referéndum. En España se establece un Estado democrático. En febrero de 1981 habrá un intento de golpe de Estado, llevado a cabo por grupos antidemocráticos, que fracasa, y el país logra asentar su democracia. España ingresa en la Unión Europea en 1986 y se encontrará entre los países más desarrollados del mundo.

Desde 1975 hasta la actualidad, la novela experimenta un gran auge. De manera general, se puede hablar de una serie de características comunes:

  • Alejamiento del experimentalismo.
  • Vuelta a la novela de ambientación realista.
  • Resurgimiento de las novelas de género.
  • Variedad temática y estilística.
  • Reaparecen las preocupaciones existenciales.
  • Se observa la ausencia de explicaciones totalizantes del mundo y se reitera la narración de experiencias sencillas y cotidianas.
  • Se abandonan las intenciones ideológicas o políticas.
  • Se simplifican las estructuras narrativas; se recupera el argumento; y el relato tradicional en tercera persona es el más frecuente.
  • Se cuenta una historia cerrada y lineal.
  • Muchas autoras defienden la condición femenina y hablan de la fragilidad de la pareja.

Relación entre Literatura y Periodismo

Existe una relación cada vez más estrecha entre literatura y periodismo. Abundan los escritores que colaboran en la prensa. Además, se cultivan géneros que mezclan ficción y periodismo documental. Entre los novelistas que escriben artículos periodísticos se encuentran Julio Llamazares, Javier Marías, Juan José Millás y Soledad Puértolas. También hay escritores que, a partir del periodismo, crean ficciones muy documentadas, como Rosa Montero.

Influencia de la Industria Editorial

La difusión de algunas novelas se realiza mediante la dramatización televisiva o el cine. La industria editorial actual no sólo debe satisfacer el consumo de novela, sino también crearlo, y cuenta con la publicidad para atraer la atención de posibles lectores. Así se comprende:

  • La proliferación de premios literarios.
  • La publicación de listas de libros más vendidos.
  • La organización de ferias del libro.
  • Las firmas de obras literarias en grandes almacenes.
  • La incorporación al mundo de la literatura de conocidos periodistas, políticos o presentadores de televisión, cuyo nombre por sí mismo atrae al lector.

Tendencias más Relevantes

  • Novela de ambientación histórica: *El capitán Alatriste* (Arturo Pérez-Reverte).
  • Novela de intriga: *La sombra del viento* (Carlos Ruiz Zafón); *Los mares del sur* (Manuel Vázquez Montalbán).
  • Creación literaria de la novela: *Juegos de la edad tardía* (Luis Landero); *Papel mojado* (Juan José Millás).
  • Novela lírica o intimista: *La lluvia amarilla* y *El río del olvido* (Julio Llamazares).
  • Memorias: *Memorias de un joven fascista* (Francisco Umbral).
  • Exploración de la realidad: *Los aires difíciles* (Almudena Grandes).
  • Novela testimonial: *Sefarad* (Antonio Muñoz Molina).
  • Neorrealismo psicológico: *El desorden de tu nombre* (Juan José Millás).
  • Neorrealismo social: *La caída de Madrid* (Rafael Chirbes).

Algunos autores combinan varias tendencias, como Eduardo Mendoza en *La verdad sobre el caso Savolta*, narración que alterna lo histórico, lo social y lo realista con la intriga policial esperpéntica. Destacan también Antonio Muñoz Molina (*Plenilunio*) y Javier Marías (*Corazón tan blanco*). Los escritores más jóvenes hablan en sus novelas de los problemas de la juventud urbana, como en *Historias del Kronen* de José Ángel Mañas o *Amor, curiosidad, prozac y dudas* de Lucía Etxebarría.

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