Personajes:

Comenzaremos con Fermina Daza pues considero que de entre ese trío de personajes, es el más importante pues hace la función de nexo de unión entre los tres. Era una mujer que disfrutaba de las flores y los animales, tenía un carácter vivo, las ideas muy claras, un marcado orgullo, se desenvolvía con garbo pero siempre siendo una dama. De apariencia física llamativa, con ojos almendrados, pelo largo y rubio usualmente peinado con una trenza, conquistó y se casó con Juvenal Urbino, matrimonio que además estuvo condicionado por su padre pues deseaba mejorar su honra con este casamiento.

El enlace fue estable y fructífero, de él obtuvieron dos hijos, muy pocos problemas entre ambos (excepto una infidelidad del marido de la cual cabe destacar su don de reconocer olores pues fue así como sorprendió a Juvenal y el incidente del jabón) y sólo al finalizar su camino juntos debido a la muerte de Juvenal, Fermina pudo tener una relación con otro hombre, Florentino con quien ya había tenido un inocente romance adolescente pero con el paso del tiempo y su matrimonio con Juvenal, fue dejando a Florentino de lado. Pero fue en esta segunda relación con Florentino cuando tras trabar de nuevo amistad con él, vivió una pasión amorosa sin límites que jamás antes había experimentado.

Además de los ya citados, quienes más influyeron en su vida fueron Lorenzo Daza , su padre, un hombre de negocios (traficante de mulas), con carácter muy estricto, quería honra y honor para su hija (similitud con el abuelo del autor) lo que les lleva a tener serios problemas que se agrandan cuando su padre rompe la relación con un personaje importante en la infancia y pubertad de Fermina, su tía Escolástica, cariñosa y relevante en su educación, la asesora en su relación por carta con Florentino lo que provoca el enfado de Lorenzo y le mueve a hacer un viaje para que se olvide de Florentino pues Lorenzo quería honra para su hija y Florentino no se la iba a dar. Es en este viaje cuando entabla relación con su prima Hildebranda Sánchez. Con ella comparte confidencias e influyó en decisiones de su prima, le enseñó a fumar y se casó con un militar con el que tuvo cuatro hijos.

 Ahora que conocemos a Fermina Daza, será más fácil definir al resto de protagonistas, pues ambos se enamoran de Fermina. En especial, Florentino Ariza que físicamente tenía el cabello oscuro y largo, vestía muy sombrío lo que le hacía parecer más viejo, y sufría miopía y estreñimiento crónico. Disfrutaba de la poesía y de ahí que escribiese poemas a Fermina cuyo enamoramiento le dejó una impronta para “toda la vida”. A raíz de esto, Florentino elaboró un carácter obsesivo y enfermizo en el ámbito amoroso y era muy romántico, vivía siempre de ilusiones y enamorado de Fermina, hecho que no le impidió tener una basta cantidad de amantes que eran por amor “de cintura para abajo” De estas amantes, las más destacadas son Rosalía, con la que se desvirga, Olimpia Zuleta que fue asesinada por el marido tras descubrir la infidelidad, América Vicuña que era mejor de edad, su última amante antes de Fermina de nuevo, se conocen porque ésta es enviada a un internado desde otra parte del país y comparte con Florentino los fines de semana. Cuando Florentino vuelve con Fermina, América se suicida. Menos importantes son Andrea, Josefa y Ángeles Por último destacamos una serie de viudas:

La viuda de Nazaret con la que comparte su primera relación amorosa, Ausencia Santander con la que compartía gusto por la poesía y Sara Noriega.

Muy relevantes fueron sus padres a pesar de que a su padre, Pío Quinto Loayza, no lo conoció por miedo al escándalo público aunque puso en práctica algunos de sus ideales como el de ser capaz de morir por amor. Por su parte, su inteligente madre, Tránsito Ariza, sí fue cercana a él y le aconsejó en su amor y lo cuidó en su desamor para acabar perdiendo la memoria al final de su vida. En el terreno laboral, primero Lotario Thugut un alemán telegrafista que le empleó como tal y con el que desarrolló amistad y le mostró el hotel donde Florentino residirá de joven y más tarde, su tío León XII le dio trabajo en la Compañía Fluvial del Caribe de la cual era director y traspasó su poder en herencia a Florentino. Su gran amistad fue Leona Cassiani, una mujer valiente que desde que se conocieron estuvo cerca de Florentino al que ayudó a ascender en la CFC gracias a su astucia. No llegaron a tener relación amorosa, lo que mantuvo siempre una elevada temperatura en sus encuentros.

El otro estandarte de la historia apoyado en Fermina es Juvenal Urbino, un doctor que disfrutó de importancia en la sociedad del momento, era el soltero más codiciado por su forma de tratar a los demás y su intelectualidad amén de ser quien más luchó contra el cólera en su ciudad (Cartagena de Indias) y de importar de sus viajes por Europa innovaciones para la prosperidad de Cartagena. Era muy positivo, como hobbies la música y el ajedrez, era fiel creyente y muy honesto. La rutina le daba seguridad y era un hombre de costumbres lo cual queda patente en su próspero matrimonio con Fermina (a la cual veía especial) que ya hemos descrito anteriormente. Murió con 81 años tratando de atrapar a un extraordinario loro al que él mismo había domesticado.

A pesar de lo cohibido que era, mantuvo sendas relaciones afectivas con otros personajes como Jeremiah de Saint Amour, antiguo soldado con el que jugaba al ajedrez y que decidió suicidarse a los 60 años pues no quería vivir la vejez, muerte que afecta mucho a Juvenal viendo ésta como cercana por primera vez. El gran problema que azotó al matrimonio de éste con Fermina (incidente del jabón aparte) fue el “desliz” con Bárbara Lynch, de la que Juvenal se encaprichó y cuando fue descubierto por Fermina, ésta abandonó la ciudad durante dos años (mostrando no ser mujer dócil). El distanciamiento atormentaba a Juvenal que dejó de lado a su amante.

De su ámbito familiar, hay que resaltar a sus padres Marco Aurelio Urbino que murió de cólera y del cual aprendió mucho en el campo médico y Blanca de la Calle, autoritaria y celosa, maltrató a Fermina.

Mencionar que Juvenal y Florentino no tienen apenas relación directa en la novela más que un par de encuentro en los que sólo se labró respeto mutuo.

Para finalizar, poner de manifiesto que estos tres personajes sobre los que gira la historia, son redondos, en absoluto típicos y con decisiones impredecibles, muchas influidas por otros personajes, a lo largo de su vida. Personalmente, no he sido capaz de sentirme totalmente identificado con ningún personaje pues en tan detallada descripción de todos ellos, es difícil no discrepar en algún aspecto importante. Lo que también nos da a entender la profunda dimensión que da Gª Márquez a estos personajes.

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