27 Nov
Guerra Carlista: Dos Opciones enfrentadas
Los insurrectos proclamaron rey a Carlos María Isidro, confiando en el. Se iniciaba así la guerra civil, que enfrentan a los defensores del Antiguo Régimen con los partidarios de un proceso reformista de carácter liberal. El carlismo se presentaba como una ideología tradicionalista y antiliberal que recogía la herencia de movimientos, como los malcontents y los apostólicos. Bajo el lema Dios, patria y Fueros, se agrupaban los defensores de la legitimidad dinámica de Carlos, de la monarquía absoluta, del mantenimiento del Antiguo Régimen, de la preeminencia social de la iglesia y un sistema foral particularista. Quienes apoyaban el carlismo eran numerosos miembros del clero y una parte de la pequeña nobleza agraria. Los carlistas también contaron con una amplia base social campesina y zonas rulares del País Vasco, Navarra y parte de Cataluña. Los carlistas se identificaban con los valores de la Iglesia. La causa isabelina contó, con el apoyo de una parte de la alta nobleza y de los funcionarios, un sector de la jerarquía eclesiástica. Pero la necesidad de ampliar una base social para hacer frente al carlismo, se vio obligada a buscar adhesión de los liberales. De este modo la regente tuvo que acceder a las demandas de los liberales que exigían el fin del absolutismo y del Antiguo Régimen.
Guerra Carlista: El desarrollo del conflicto armado:
Los carlistas no pudieron contar con un ejercito regular y organizaron sus efectivos en grupos armados que actuaban según el método de guerrillas. Las primeras partidas carlistas se levantaron en 1833 ,el foco más importante se sitúo en las regiones montañosas de Navarra y País Vasco. Don Carlos recibió el apoyo de potencias absolutistas que le enviaron dinero y armas Isabel II contó con el apoyo de Gran Bretaña, Francia y Portugal. El conflicto armado paso por dos fases:La primera etapa(1833-1835) la guerra en el norte y los triunfos carlistas. La insurrección tomo impulso en 1834 cuando el pretendiente abandono Gran Bretaña para instalarse en Navarra. El general Zumalacárregui logró organizar un ejercito con el que conquistó Tolosa, Durango, Vergara y Éibar, fracasó en la toma de Bilbao. En la zona de Levante, los carlistas estaban más desorganizados. Las del norte de Cataluña tenían su actividad en las montañas y bosques del Prepirineo. Las de las tierras del Ebro se unieron a las del Maestrazgo y el Bajo Aragón, por el general Cabrera, uno de los líderes carlistas más destacados.-La segunda fase(1836-1840) la guerra se decantó hacia el bando liberal a partir de la victoria del general Espartero en Luchana. Los insurrectos iniciaron una nueva estrategia caracterizada por las expediciones a otras regiones. La más importante fue la expedición real de 1837 con la intención de tomar la capital. La constitución de la debilidad del carlismo propició discrepancias entre los transaccioncitas, alcanzar un acuerdo con los liberales, y los intransigentes, defensores de continuar la guerra. El general Maroto, acordó la firma del Convenio de Vergara.
América Hispana:La América española a finales del siglo XVIII:
A lo largo del siglo XVIII, la preocupación de los Borbones por los territorios de ultramar había dado lugar a una etapa de prosperidad basada en la reactivación del comercio y en la puesta en marcha y explotación de numerosas plantaciones. El crecimiento económico propicio el desarrollo de un poderoso grupo burgués criollo, de raza blanca pero nacido en América. Fue entre esta burguesía criolla donde las ideas de emancipación de la metrópoli tomaron cuerpo y los proyectos de independencia.
Estos anhelos estaban provocados por el teatro discriminatorio dado a los criollo, por el sometimiento a fuertes impuestos y por el control que España ejercía sobre la economía y el comercio. El ejemplo de la independencia de Estados Unidos fue crucial para mostrar que era posible enfrentarse a la metrópoli y seguir la victoria. Gran Bretaña, deseosa de controlar el mercado americano, se encargo de respaldar los movimientos secesionistas, convencida de que podrían dominar fácilmente el mercado de las nuevas naciones después de haberse independizado.
El trienio liberal:
Rafael del Riego, al frente soldados en la localidad de Las Cabezas de San Juan recorrieron Andalucía proclamando la constitución de 1812. Obligaron al rey Fernando VII a aceptar la Constitución. Independientemente se formó un nuevo gobierno que proclamó una amnistía y convocó elecciones a Cortes. Los resultados electorales dieron la mayoría a los diputados liberales, que iniciaron una importante obra legislativa. Impulsaron la liberación de la industria y del comercio, iniciaron la modernización política. Se formaron ayuntamientos y se reconstruyó la milicia nacional. Fernando vii, opuesto a estas reformas busca recuperar su poder y pide ayuda a la Santa Alianza, quien envía a los Cien Mil Hijos de San Luis
America hispana: El proceso de independencia:
A partir de 1088, en plena Guerra de la Independencia, los criollos no aceptaron la autoridad de José Bonaparte y crearon Juntas que asumieron el poder en sus territorios. Hacia el siglo 1810 muchas de ellas se declararon autónomas respecto a la metrópoli. Los focos más secesionistas fueron: el virreinato del Río de la Plata, donde José de San Martín proclamó la independencia de la República Argentina , el virreinato de Nueva Granada y Venezuela , se situó el otro gran líder Simón Bolívar y México , dirigido por Miguel Hidalgo y José María Morelos. Las Cortes de Cádiz consideraron las colonias como territorio español y reconocieron los derechos de los criollos. En 1814, la finalidad de la guerra hispanofrancesa , Fernando VII, en vez de buscar el acuerdo con los americanos, respondió con el envió de un ejército que pacificó Nueva Granada y México, se mostró impotente en el virreinato del Río de la Plata: Paraguay y Argentina se consolidaron como naciones independientes. En los años siguientes. En los años siguientes se estimuló el crecimiento del movimiento liberador. San Martín atravesó los Andes, derrotó a los españoles en Chacabuco y la independencia de Chile. Bolívar, derroto al ejército español en Boyacá y Carabobo y puso las bases para la formación de la Gran Colombia, que dio origen posteriormente a las repúblicas de Venezuela, Colombia, Ecuador y Panamá. Tras la derrota de Ayacucho y las independencias de Perú y Bolivia se acabó la presencia española en América continental. Solo las Antillas y las Filipinas permanecieron como posesiones españolas
Antiguo Regimen:Sexenio Adsolutista: La restauración del absolutismo:
Los liberales desconfiaban del monarca para aceptar el nuevo orden constitucional. Por ellos dispusieron que viajara directamente a Madrid para jurar la Constitución y aceptar el nuevo marco político. Fernando VII temió enfrentarse. Pero los absolutistas sabían que la vuelta del monarca era su mejor oportunidad para deshacer toda la obra de Cádiz y volver al Antiguo Régimen. Se organizaron la restauración del absolutismo( Manifiesto de los Persas ) y movilizaron al pueblo . Fernando VII traicionó sus promesas y , mediante el Real Decreto de 4 de mayo de 1814 anuló la Constitución y las leyes de Cádiz y anunció la vuelta al absolutismo. La monarquía procedió a la restauración de todas las antiguas instituciones del régimen señorial y de la inquisición. Era una vuelta al Antiguo régimen. En 1815 Fernando VII y su gobierno intentaron rehacer su país destrozado por la guerra. Sus gobiernos fracasaron uno tras otro. Las elevadas pérdidas humanas y materiales arruinaron al campesinado y significaron la aparición del comercio. La Hacienda real entró en bancarrota por falta de recursos económicos e impidió la llegada de nuevos ingresos. Hay que añadir que el campesino había dejado de pagar las rentas señoriales y las protestas se sucedían antes la pretensión de volver a imponer los viejos tributos, la libertad de fabricación y de mercado había permitido el desarrollo de empresas y negocios. Por último, la integración de jefes de la guerrilla en el ejército originó un sector liberal. Los gobiernos de Fernando VII fueron incapaces de dar respuesta a los problemas. Los pronunciamientos militares liberales evidenciaron el descontento y la quiebra absoluta. La represión fue la única respuesta de la monarquía a las demandas políticas y sociales.
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