28 Feb

La Transición Española a la Democracia y la Constitución de 1978 (1975-1978)

1. Introducción

La muerte del general Franco el 20 de noviembre de 1975 marcó un punto de inflexión en la historia de España, abriendo un período de gran incertidumbre y complejidad política.

2. La muerte de Franco y el gobierno de Arias Navarro

El 22 de noviembre, Juan Carlos de Borbón fue proclamado Jefe del Estado. Carlos Arias Navarro fue confirmado en su puesto por el rey, formando un nuevo gabinete. Este nuevo gobierno se limitó a aprobar una ley de asociación muy restrictiva, que excluía a los partidos políticos. En el verano de 1976, la situación política se encontraba estancada: los sectores inmovilistas rechazaban cualquier reforma, mientras que la oposición no tenía la fuerza suficiente para imponer una ruptura. El sector aperturista promovió una «tercera vía», una reforma que partiera de las propias leyes franquistas para evitar la ruptura. Las declaraciones del rey en contra de Arias Navarro y a favor de la democratización del país, durante una visita a Estados Unidos, precipitaron la dimisión del presidente el 1 de julio de 1976.

3. El primer gobierno de la transición: Adolfo Suárez

Adolfo Suárez fue designado sucesor por el rey. El gobierno de Suárez presentó ante las Cortes la Ley para la Reforma Política (LRP). Las Cortes Orgánicas aprobaron su propio final el 15 de diciembre de 1976.

La implementación de la LRP enfrentó desafíos significativos: ETA y el GRAPO (grupo de extrema izquierda) intensificaron sus acciones, incluyendo el secuestro del presidente del Consejo de Estado, Antonio María de Oriol. La extrema derecha también se reactivó a través de grupos paramilitares neonazis.

  • Manuel Fraga fundó Alianza Popular (AP).
  • El Partido Comunista de España (PCE), liderado por Santiago Carrillo, fue legalizado.

4. Las elecciones de 1977 y los Pactos de la Moncloa

Las primeras elecciones democráticas en España se celebraron el 15 de junio de 1977. La Unión de Centro Democrático (UCD) obtuvo la victoria con 165 escaños, seguida por el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) con 118. El PCE consiguió 20 diputados, mientras que AP obtuvo 16. Los nacionalistas catalanes lograron 11 escaños y el Partido Nacionalista Vasco (PNV), 8. Suárez formó su segundo gabinete en julio, enfrentando la grave situación económica del país, derivada de la crisis mundial del petróleo de 1973: la inflación superaba el 25% y las organizaciones obreras mantenían un alto nivel de reivindicaciones. Para abordar esta situación, se firmaron los Pactos de la Moncloa, un acuerdo entre el gobierno, los partidos políticos, los sindicatos y las organizaciones empresariales.

5. La Constitución de 1978

a) El modelo de Estado

España se define como un Estado plural, con una monarquía parlamentaria como forma de gobierno y la soberanía nacional como principio fundamental. Se establece un Estado descentralizado, aunque unitario, reconociendo las diferencias regionales pero enfatizando la unidad e indivisibilidad de la nación. Todo ello en el marco de una economía de mercado, con la posibilidad de intervención estatal como corrector en situaciones necesarias.

b) Derechos y libertades

El Título Preliminar establece que «España se constituye en un Estado social y democrático de Derecho»: social, porque los poderes públicos deben orientarse a mejorar el bienestar general; democrático, por la participación ciudadana en las instituciones; y de derecho, porque todos los poderes están sujetos a la ley.

c) La división de poderes

La Corona desempeña funciones simbólicas, como arbitrar el buen funcionamiento de las instituciones y representar a España en el exterior.

Las Cortes Generales, compuestas por el Congreso de los Diputados y el Senado, ostentan el poder legislativo. Ambas cámaras se eligen por sufragio universal directo y sus funciones incluyen la aprobación de los presupuestos y el control del gobierno.

d) La organización territorial

Este fue el capítulo más controvertido de la Constitución, ya que debía conciliar las aspiraciones de las fuerzas nacionalistas con la necesidad de preservar la unidad de España para satisfacer a los sectores inmovilistas. La solución fue el Estado de las Autonomías, que se basa tanto en la indisoluble unidad de España como en la existencia de Comunidades Autónomas con órganos e instituciones propias. Se trata, por tanto, de un Estado unitario (no federal) descentralizado.

6. Conclusiones

La Transición es uno de los períodos históricos más destacados y complejos de España. La Constitución de 1978, fruto de un amplio consenso, sentó las bases de la democracia española. Sin embargo, dado el tiempo transcurrido y la profunda transformación social del país, se plantea el debate sobre la necesidad o no de su reforma.

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