20 Feb
Características del Turismo Postfordista y Fordista: Un Análisis Comparativo
1. Turismo Postfordista: Flexibilidad y Especialización
Economías de Escala y de Red
Las empresas turísticas combinan economías de escala y de red. Esto implica la externalización de servicios a través de diversas formas de colaboración o mediante fórmulas de gestión variadas, como franquicias. Por ejemplo, los operadores turísticos a menudo externalizan las excursiones, aunque las sigan ofreciendo en sus paquetes.
El desarrollo de estas economías facilita la aparición de operadores especializados de forma más marcada que en el modelo fordista.
Segmentación de la Oferta
El concepto de turismo de masas ha sido superado por una oferta diversificada y fragmentada. El modelo postfordista actúa en dos direcciones:
a. Localización y segmentación de nichos de mercado:
Las estrategias de marketing se orientan a mercados o segmentos específicos, complejizando la organización publicitaria.
b. Diferenciación de productos turísticos “específicos”:
El turismo de «sol y playa» coexiste con una variedad de productos turísticos. Estos se diversifican, se hacen flexibles y personales. El producto «sol y playa» incluso experimenta cierto desprestigio en algunos grupos en países como España. La playa se combina con deportes, formación, compras u otras actividades de ocio.
c. Desconcentración temporal y fragmentación de la oferta:
Se observa una desestacionalización en la actividad turística, debido a cambios en los hábitos de los consumidores, que ahora realizan varios viajes turísticos a lo largo del año. Esto ha impulsado el crecimiento de pequeñas empresas turísticas especializadas en segmentos de mercado específicos, como turismos temáticos.
2. Turismo Fordista: Masificación y Estandarización
Características Principales
1. Democratización del Viaje Turístico:
El turismo se convierte en una actividad de ocio accesible para casi todas las clases sociales desde los años cincuenta del siglo XX. Este proceso se relaciona con los avances tecnológicos en el transporte y la aparición de una amplia oferta de destinos y modalidades de viaje. Sin embargo, la democratización del viaje turístico no elimina las desigualdades en el acceso, ya que no todos los individuos viajan con la misma frecuencia, existiendo diferencias económicas, culturales y de oportunidades.
2. Dominio de la Oferta sobre la Demanda:
El producto principal es el viaje organizado, y la actividad más demandada es la recreación en torno a la playa y el sol durante el verano. Los operadores turísticos son los protagonistas, impulsando la integración vertical de la oferta.
3. Centralidad del Producto Turístico “Sol y Playa”:
El producto estrella es “sol y playa”. Este modelo fomenta una demanda creciente pero estacional, concentrada en el verano.
4. Concentración Espacial, Temporal y Separación de Otras Actividades Sociales:
El modelo fordista implica una concentración espacial de la actividad en áreas delimitadas del litoral, que se abstraen de su contexto y se convierten en escenarios de exhibición social. También se concentra temporalmente en los meses de verano.
5. Internacionalización de la Actividad:
El turismo internacional se expande a nivel mundial, impulsado por la demanda de destinos y experiencias alternativas. La expansión de empresas hoteleras, operadores y compañías aéreas también contribuye a esta internacionalización.
6. Demanda Organizada en Torno al Consumo de Imágenes:
Los operadores turísticos crean y comercializan imágenes vacacionales. Para hacer atractivo el viaje, seleccionan imágenes que organizan el tiempo y el espacio de la “experiencia visual”, asociadas al estatus social. Los folletos turísticos sirven como herramientas para que los turistas construyan sus propias fantasías.
3. La Globalización: Un Factor Común
La globalización crea nuevos paisajes turísticos, influyendo tanto en el modelo fordista como en el postfordista, impulsando la diversificación de destinos y la internacionalización de la actividad.
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